El coronavirus entró en el país ibérico y se fue propagando de forma silenciosa a lo largo de todo su territorio, pero no lo hizo de la misma forma en todas las regiones. ¿Qué es lo que hizo que la pandemia estallara con más fuerza en España y que tuviera más incidencia en unas zonas que en otras?
Los resultados del estudio son preliminares, de hecho, solo analiza el periodo de ascenso hasta el día 20 de marzo.
Los investigadores han llegado a la conclusión de que son cinco los factores clave que han tenido "un papel importante" a la hora de contribuir a que la difusión del coronavirus en España se haya comportado de forma diferente en las comunidades autónomas.
Tres de estos factores están ligados al movimiento: la movilidad interna (que afectó en mayor grado a Madrid y Cataluña), la movilidad externa desde Madrid y desde el País Vasco.
A ellos se suman otros dos factores relacionados con la asistencia sociosanitaria: las plazas en residencias de mayores por cada 100 habitantes mayores de 70 años y el porcentaje de personal sanitario infectado.
"Como conclusiones de este primer análisis se puede decir que la movilidad interna en ámbitos urbanos con gran actividad, la difusión a partir de focos iniciales a territorios contiguos y la falta de contención en el ámbito socio-sanitario han sido clave en el ascenso de la pandemia", afirman.
Además, el estudio explica que el 8 de marzo fue una fecha clave en la propagación del virus, día en el que España alcanzó la tasa de disparo. "Se considera tasa de disparo cuando la incidencia supera el umbral de cinco casos por 100.000 habitantes", explican. El 8 de marzo se sumaron 2.287 nuevos casos, casi un 24% más que el día anterior. Para el análisis utilizan los casos diarios comunicados a la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave) por fecha de inicio de síntomas (o, en su ausencia, por fecha de diagnóstico menos seis días).
Finalmente, los investigadores lanzan varias recomendaciones para hacer frente a la expansión del virus como son: el uso de medidas de protección para que los movimientos de la población sean más seguros, como el uso de mascarilla, lavado de manos, distanciamiento social y aislamiento en caso de infección o contacto.
Subrayan, además, la importancia de tomar todas las medidas necesarias para proteger al personal sanitario y a los residentes y trabajadores de centros sociosanitarios.