Guto Silva, secretario de la Casa Civil —la oficina ejecutiva— del estado, entregó a Serguéi Akopov, embajador de Rusia en Brasil, un protocolo de intenciones el pasado 24 de julio durante una reunión en Brasilia.
"Fue una conversación de alto nivel y muy positiva. [Los rusos] están dispuestos y necesitan socios", compartió el secretario con el medio brasileño Estadao.
Durante el encuentro, Silva puso a disposición de Rusia el Instituto de Tecnología de Paraná (Tecpar) que actualmente ya trabaja en asociación con el Ministerio de Salud de Brasil. De acuerdo con el secretario, en caso de que el preparado desarrollado en Rusia sea aprobado por las agencias reguladoras, el instituto actuaría como un polo de producción y distribución de la vacuna para América Latina.
Actualmente, Brasil ocupa el segundo lugar en el ranking mundial de enfermos y muertos por COVID-19 en el mundo. Según los últimos datos oficiales del Gobierno brasileño, cerca de 2,4 millones de ciudadanos se contagiaron con el virus SARS-CoV-2, mientras que 86.449 han fallecido a raíz de la infección en el país.