"Hoy, el Departamento de Justicia anuncia cargos en un importante asunto cibernético de seguridad nacional. La oficina del Fiscal de EEUU para el Distrito Este de Washington y la División de Seguridad Nacional han registrado a dos piratas informáticos chinos que trabajan con el Ministerio de Seguridad del Estado de China (MSS), incluido el Departamento de Seguridad del Estado de Guangdong, GSSD", dijo Dermers.
Dermers añadió que "la campaña se centró en la propiedad intelectual y la información comercial confidencial en poder del sector privado, incluido el tratamiento, las pruebas y las vacunas relacionados con el coronavirus".
El fiscal informó que los hackers atacaron a empresas en al menos diez países.
"El comportamiento anticompetitivo de China y el flagrante desprecio por sus promesas de no involucrarse en el robo de propiedad intelectual habilitado por el cibernético no es solo un problema interno, es un problema global", dijo Demers y añadió que "la acusación alega actividad contra empresas en al menos diez países de todo el mundo".
"Hemos visto que otras naciones, como China, usan este virus para explotar a otros países para obtener ventajas políticas. Nos negamos a permitir que nuestra innovación sea explotada por China, Rusia o cualquier otro hacker", dijo McCarthy.
El proyecto de ley de McCarthy "autorizaría la imposición de sanciones" a los hackers que intenten robar la investigación sobre una vacuna COVID-19.
"Hay mucho en juego para que estos delitos cibernéticos importantes queden impunes. Mi legislación responsabilizará a estos criminales", añadió McCarthy.
Funcionarios en EEUU y otras naciones occidentales han acusado a piratas informáticos chinos, iraníes y rusos de atacar a desarrolladores de vacunas estadounidenses, canadienses y británicos.
Rusia niega los cargos y ha informado de un amplio progreso en los esfuerzos de los científicos de su país para desarrollar una vacuna.