"Sin justicia no hay paz" decía uno de los carteles que llevaron frente al Ayuntamiento. En menos de una semana tres incendios acabaron con las viviendas que los trabajadores temporales agrarios levantaron de forma improvisada en Lepe, un municipio de Huelva en la comunidad autónoma de Andalucía, al sur de España.
"En menos de un mes ha habido tres incendios diferentes y en una semana dos. Entonces decidimos hacer una concentración en la puerta del Ayuntamiento para que nos den una solución inmediata y urgente", explica Haya Fonfana, un joven de 29 años inmigrante de Mali, país situado en África occidental.
Muchos de estos inmigrantes africanos llegaron a España tras el llamado que hicieron en abril las autoridades del Gobierno nacional para garantizar la recogida de las cosechas por la falta de mano de obra en el campo. Sin embargo, sus vidas se han visto afectadas tras el incendio de sus chabolas, esos precarios asentamientos en donde viven durante la temporada de recolección.
El incendio no solo acabó con sus improvisadas casas, sino con las pocas pertenencias que tenían y con su documentación. Para Lamine Diakite, otro de los manifestantes, estos incendios no parecieran ser casuales.
"Durante cinco días tres incendios, eso no es normal. Nosotros creemos que son incendios provocados", insiste Diakite, inmigrante africano de 33 años nacido en Mali.
Los inmigrantes que trabajan de forma temporal en el campo español y los miembros del colectivo Solución Asentamientos, que han organizado la protesta frente al ayuntamiento, exigen soluciones para todos los afectados por los incendios.
Además de haberlo perdido todo y de no tener ni una cama para dormir, estos inmigrantes africanos denuncian que son discriminados por su origen.
"Encontramos mucho racismo en el trabajo o cuando buscamos vivienda. Por ejemplo, cuando llamo por teléfono y te preguntan ¿de dónde eres? Cuando dices 'yo soy de África' te dicen 'vale, el piso ya está ocupado'. Nos pasa un montón de veces", lamenta Diakite.
Para ellos, una solución a todos estos problemas pasa por la regularizar su situación migratoria, un paso que les permitiría gozar de todos sus derechos ciudadanos.