"[Nada] en el texto o la estructura del Artículo II y la Duodécima Enmienda contradice la distribución fundamental del poder preservado por la Décima Enmienda; los poderes reservados a los estados con respecto a los electores presidenciales no pueden ejercerse de tal manera que violen los mandatos constitucionales expresos", dijeron los jueces.
Los jueces confirmaron la decisión de los estados de Washington y Colorado (oeste) de penalizar a los miembros del Colegio Electoral en las elecciones presidenciales de 2016 que habían roto su compromiso de votar por la candidata demócrata Hillary Clinton después de que ella obtuviera la mayoría en el voto popular.
"Cuando la Constitución no dice nada sobre el ejercicio de un poder particular, el Gobierno federal carece de ese poder y los estados lo disfrutan (...) Esta asignación de poder es evidente en la estructura de nuestra Constitución", explicó el fallo.
El mismo indica que los miembros enviados al Colegio Electoral para votar por los candidatos específicos que ganaron el voto popular en las elecciones presidenciales nacionales no son libres de cambiar su apoyo a otros postulantes cuando el organismo se reúne para ratificar el resultado.