"Este es un plan ambicioso, porque debemos ser ambiciosos si no queremos ver más cómo las mujeres sufren y mueren a manos de los violentos", defendió el mandatario al presentar esta iniciativa junto a la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta.
El programa se elaboró en base a más de 1.600 propuestas que presentaron organizaciones sociales, ministerios y organismos de la sociedad civil.
El presidente señaló como "vergonzoso que alguien padezca violencia por ser mujer" y afirmó que esa situación "no se puede soportar más y debe ser castigado".
El Plan Nacional pretende implementar una serie de políticas contra la violencia por motivos de género que estará vigente desde junio de este año hasta junio de 2022, y que incorpora los derechos establecidos en la ley de Identidad de Género, del año 2012.
Esta normativa convirtió a Argentina en el primer país de América en dar nombre a este derecho que reconoce la identidad autopercibida de las personas del colectivo trans.
El presidente aludió a esta legislación al afirmar que ese "fue el comienzo de un tiempo de más igualdad en un país donde la igualdad muchas veces no era la regla".
Ejes del programa
La iniciativa presentada este 3 de julio conlleva un cambio de paradigma al haberse elaborado a través de un proceso participativo que se concretó por medio de foros federales presenciales y virtuales y audiencias con actores institucionales de los tres poderes del Estado.
El Gobierno también constituirá doce centros territoriales de políticas de género en todo el país, que se gestionarán con provincias y municipios.
Entre otras medidas, el plan nacional establece la creación del Programa para el Apoyo Económico Urgente y la Asistencia Integral Inmediata para Familiares en casos de Femicidio, Travesticidio y Transfemicidio.
El programa también prevé modernizar y optimizar el acceso a la línea telefónica de asesoramiento 144 y fortalecer los servicios de salud sexual y reproductiva en la atención de las mujeres que tengan derecho a la interrupción legal del embarazo.
En paralelo, se impulsarán políticas públicas para ofrecer condiciones materiales a fin de que las víctimas puedan desarrollar un proyecto de vida autónomo.
Durante su intervención, Fernández reconoció que él es el primero "que se pone en cola de los que tienen que cambiar" en asuntos de género.
Por otro lado, destacó que su Gobierno es el que "más mujeres tiene en funciones de alta jerarquía".
"La solución está en nuestras manos y del patriarcado también vamos a salir y seremos más iguales", afirmó.
En Argentina el aborto es un delito penal, pero el artículo 86 del Código Penal autoriza interrumpir un embarazo cuando está en riesgo la vida o la salud de la mujer, o cuando la gestación fue producto de una violación.
Entre el 1 de enero y el 30 de junio, 143 mujeres fueron asesinadas por su condición de género, según alertó esta semana la organización feminista Mumalá (Mujeres de la Matria Latinoamericana).