"Hay miles de trabajadores de la salud que están en un sistema de contratación precaria, sin seguridad social; en el corto plazo, estamos exigiendo que se reconozca el riesgo de trabajo como causa de defunción de nuestros compañeros", dijo a periodistas el enfermero Rafael Soto Cruz en la sede nacional del organismo estatal.
Los inconformes entregaron un documento con 10 puntos específicos de sus reclamaciones, en la reclaman acciones para enfrentar "la problemática actual del sistema de salud" nacional, presionado por la pandemia de SARS CoV-2.
Los inconformes se refirieron al director federal del IMSS, Zoé Robledo, quien contrajo COVID-19 hace tres semanas y recién se reintegró a sus labores en el equipo principal que combate la pandemia.
"Exigimos un puente directo con la realidad, la realidad somos nosotros, los que nos contagiamos, los que no tenemos seis pruebas como las que se hizo Zoé Robledo, para saber si estamos enfermos", dijo el dirigente de la UNTS.
Soto Cruz, lanzó una interrogante que resume el descontento de los trabajadores: "¿Hay funcionarios y trabajadores de primera, segunda y tercera? Él (Robledo) sí tiene derecho a seis pruebas, mientras que nuestros compañeros pueden morir sin una sola".
Desde finales de febrero al 16 de junio pasado, habían fallecido a lo largo de toda la epidemia 463 trabajadores de la Salud a causa de las complicaciones de COVID-19.
Un puente para el diálogo
Los trabajadores de la salud organizados plantearon la necesidad de dialogar sobre sus reclamos que se han extendido por decenas de ciudades de todo el país.
"Estamos pidiendo tener un puente de diálogo entre la realidad que somos nosotros, los compañeros de limpieza e higiene, los de ambulancia, los enfermeros, los médicos, los operativos", prosiguió el mensaje de la dirigencia de los trabajadores de salubridad.
También criticaron a los funcionarios que egresaron de centros de estudio de élite y de escuelas particulares, "que jamás en su vida han estado en una fila única", como la que padecen los trabajadores sanitarios de menor rango.
Las demandas de los empleados del sector salud están contenidas en el llamado "decálogo que la Unión Nacional de Trabajadores de la Salud", que ya fue entregado el miércoles a todos los titulares de las instituciones de del sector Salud de todos el país.
"El documento ya lo tiene Zoé Robledo, lo tiene la Secretaría (federal) de Salud, lo tiene la Secretaría de Gobernación", encargada de la política interior, anunció el portavoz.
"Si no son reinstalados esta tarde estaremos movilizándonos" advirtieron.
Por su parte, Óscar Martínez García, trabajador de la salud en el sureño estado de Oaxaca, pidió en la misma sede federal de la seguridad social "que se pare la represión por parte del Estado y la dirección del IMSS".
Denunciaron que en los centros de trabajo han sido amenazaron los trabajadores que protestan contra las arbitrariedades, "no les otorgaron un pase de salida para que aquí estuvieran" en la protesta dijo Martínez.
Los manifestantes insistieron en que sus protestas son pacíficas.
Martínez insistió en que sus compañeros necesitan urgentemente "equipo indispensable para que puedan atender a enfermos COVID-19".
Según un informe oficial, hasta el 16 de junio pasado, habían dado positivo de COVID-19 32.388 personas en el sector de salud, de los cuales eran casos activos 5.276, detectados dos semanas antes de esa fecha.
Entre los casos confirmados de contagios en el sector, el 41 por ciento son enfermeras o enfermeros.
Casi 28.000 personas fallecieron en México y los contagios confirmados superan los 226.000 contagios en todo el país.