"Valoramos altamente y apoyamos los esfuerzos que desarrolla Rusia, que no abandonó a Libia, sino actuó de verdad del lado libio, procurando que Libia vuelva a ocupar su posición de antes entre otros países. Lejos de estar presionando sobre los libios, Rusia actuó como su soporte en la lucha contra el terrorismo y los grupos ilegales", señaló.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, dijo en más de una ocasión que Rusia no está del lado de nadie en el conflicto libio y pone por encima de todo los intereses del pueblo libio, señaló que Moscú persigue el objetivo de lograr que la paz y la seguridad se impongan en todo el territorio de Libia.
Injerencia militar de Egipto
Además, Ahmed Huma refutó la información sobre la intromisión militar de Egipto o Rusia en la situación en Libia.
Huma al mismo tiempo dijo que no existe motivo para poner en tela de juicio la promesa del presidente de Egipto, Abdelfatah Sisi, de acudir en ayuda si los partidarios del Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN) intentan avanzar desde Trípoli hacia Sirt y recalcó especialmente su intención de respaldar a las tribus libias en su lucha contra los partidarios del GAN.
El mandatario egipcio, al recorrer hace poco el distrito militar oeste limítrofe con Libia le ordenó estar preparado para cumplir misiones de combate tanto dentro del país como afuera.
"Cuando el presidente Sisi habla de las ciudades libias de Sirt y Al Jufrah como de una línea roja que las tropas leales al Gobierno de Trípoli no deben cruzar, eso indica que él enfoca a Libia como un país único, no dividido, y que Egipto no contribuirá a su división"; señaló Huma.
El avance de las tropas del GAN hacia la ciudad de Sirt significa la incursión en la llamada "media luna petrolera" libia, lo que podría provocar una guerra civil, dijo y agregó que Egipto procura impedirlo.
Además, Egipto, a diferencia de Turquía, jamás ha sido una potencia colonial, indicó.
El legislador destacó asimismo los intentos de otros "Estados amistosos" de lograr el cese del fuego en Libia y volver al proceso negociador, en particular de Alemania y Rusia.
El pasado 6 de junio, El Cairo acogió una reunión entre Abdelfatah Sisi y Aguila Saleh, y el jefe del ENL, mariscal Jalifa Haftar, al término de la cual fue anunciada una nueva iniciativa de paz que prevé una tregua en todo el territorio libio, la retirada de las fuerzas extranjeras y el desarme de los grupos armados.
La iniciativa fue respaldada por Rusia, Estados Unidos y varios países árabes, incluidos Arabia Saudí y Emiratos Árabes, mientras que el Gobierno de Trípoli y Turquía la rechazaron.
Libia continúa sumida en una crisis desde que la caída del que fuera su líder durante décadas, Muamar Gadafi, en 2011, derivara en violentos enfrentamientos entre facciones rivales.
Haftar desde abril de 2019 no cesa los intentos de apoderase de Trípoli.
A finales de enero pasado Moscú intentó sentar a la mesa de negociaciones a las principales fuerzas en confrontación libias, las conversaciones se desarrollaron con la participación de los ministros de Exteriores y de Defensa de Rusia y Turquía.