El hallazgo consta de más de dos docenas de anzuelos hechos a base de huesos y piedras perfectamente tallados que usaban para pescar. Estos objetos fueron descubiertos en las orillas del río Jordán, lugar donde se encontraba el lago denominado Hula en la era prehistórica. Los arqueólogos consideran que los artefactos fueron empleados para la pesca durante un periodo de 10.000 años.
Según publica el medio Haaretz, este sitio era considerado como único por los arqueólogos luego de que encontrasen otros objetos rudimentarios relacionados con la pesca. Estos objetos demostraron que las civilizaciones de ese entonces permanecieron por un tiempo en el lugar, pero no llegaron a construir ningún asentamiento debido a que el nivel de agua del lago prehistórico no era constante.
La mayoría de otros sitios similares están marcados por la ocupación de civilizaciones antiguas. Sin embargo, el río Jordán es el único lugar donde las personas prehistóricas no realizaron un asentamiento. Aparentemente, lo utilizaban para realizar explotar recursos acuáticos y semiacuáticos como moluscos, cangrejos, tortugas y anfibios.