Serguéi Jursévich, asesor del grupo, explica que los paracaídas submarinos funcionan al contrario, pueden sacar a un objeto desde las profundidades del agua mediante la inyección de aire por debajo de la campana.
La empresa lanzó recientemente al mercado el paracaídas Shans para labores de rescate desde los rascacielos, en caso de incendio u otra emergencia. El equipo está diseñado para ser usado por personas sin entrenamiento y cuenta con tres campanas.
"Algunas compañías adquirieron estos paracaídas para sus oficinas, pero de momento es prematuro hablar de cantidades grandes", matizó.
Technodinamika desarrolla también el paracaídas de frenado para la nave espacial Oriol, cuyo primer vuelo de pruebas a la Luna está programado para 2023.
Materiales
Respecto a los materiales que se usan en la producción de los paracaídas, Jursévich avanza que estos se mejoran constantemente. Las inversiones, dijo, son enormes en este ámbito.
"Los clientes exigen que el paracaídas vuele mejor, pese menos y sea más seguro. Nuestra empresa trabaja en el mejoramiento de todos estos parámetros. En cuanto a los materiales textiles, aquí lo más importante es que la permeabilidad al aire sea menor (...) En un futuro próximo tendremos importantes éxitos en esta área", señaló.
Jursévich destacó la seguridad de los paracaídas y atribuyó los accidentes a errores humanos.
Otro tipo de accidente es el choque de dos paracaidistas en parapente, agregó tras recalcar que la causa es el factor humano.
El asesor se refirió también a las famosas mochilas voladoras.
"Una de sus ventajas es la demostración de fuerza, pero su desventaja más evidente es que es muy ruidosa y al perecer necesita mucho combustible", dijo.
Tendencias
El mundo de los paracaídas, explica Jursévich, avanza orientado hacia una mayor seguridad del sistema. "Esto se refiere a los mecanismos de seguridad, el aumento de la vida útil del paracaídas", sostuvo, e indicó que la segunda tendencia es la calidad, el mejoramiento de los dispositivos de automatización e incluso llegar a un paracaídas completamente automático.
"Ahora, por ejemplo, los túneles de viento aceleran la capacitación. Es decir existen dos tendencias contrarias. Por un lado, tenemos sistemas modernos que requieren una alta preparación, y por el otro, nuevas metodologías que permiten acelerar el proceso de aprendizaje. Ahora con los sistemas avanzados bastan entre tres y seis semanas para formar un paracaidista. Antes el ciclo de preparación duraba más de un año", explica.
Jursévich destacó el liderazgo absoluto de Technodinamika en la producción de paracaídas para uso espacial y en cuanto a los diferentes que produce, enfatizó que la compañía está al nivel mundial.
"No he escuchado que otra compañía, excepto Technodinamika, fabrique paracaídas para uso en las minas subterráneas, ni tampoco submarinas", recalcó el asesor, quien indicó que la compañía rusa supera a sus competidores o están al mismo nivel.
Jursévich admitió cierto rezago en los que se refiere a los paracaídas deportivos y lo atribuyó a la cantidad de saltos que se hacen anualmente, y recordó que si bien en Rusia los deportistas realizan un total de 300.000 saltos anuales, en Estados Unidos se hacen unos tres millones.
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Para el asesor, esta situación se debe a diversos factores y uno de ellos es el clima. Si en California se salta el año completo, en Rusia el clima permite saltar solo entre mayo y septiembre.
Technodinamika, fundada en 2009, aglutina a 35 plantas e instituciones de investigación distribuidas en la amplia geografía rusa.
