Para Libia, "la interferencia en sus asuntos internos y los ataques a su soberanía, ya sea por declaraciones como las del presidente egipcio o por el apoyo a golpistas, milicias y mercenarios, son inaceptables", destacaron desde el GAN en un comunicado citado por el canal de televisión Al Jazeera.
Previamente el presidente egipcio había declarado que cualquier intervención directa del Estado egipcio ahora había "adquirido legitimidad internacional".
"Si algunas personas creen que pueden cruzar la línea entre [los distritos] Sirte y Al Jufrah, esta es una línea roja para nosotros", advirtió.
Las palabras del presidente egipcio y la respuesta del Gobierno de Acuerdo Nacional, reconocido por la ONU, llegaron en vísperas de la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe sobre Libia, en la que el GAN se negó a participar.
Desde principios de junio, Turquía ha venido incrementado su apoyo a las fuerzas pro-GAN que acabaron tomando el control sobre el noroeste de Libia y lograron detener la ofensiva lanzada por Haftar contra Trípoli. Ahora, el avance del GAN se estancó fuera de la ciudad costera de Sirte, un punto de acceso estratégico a los campos petroleros clave de Libia controlados por Haftar.