"Ha sido difícil la compra de pruebas para el COVID-19, mascarillas, trajes de bioseguridad, con las restricciones que han sido multiplicadas por parte de los Estados Unidos", indicó Arreaza durante su participación en la XXV reunión ordinaria del Consejo de Ministros de la AEC.
El canciller recordó que ante la pandemia, el secretario de la ONU, António Guterres, y la alta comisionada para los DDHH, Michelle Bachelet, solicitaron el levantamiento de las medidas coercitivas, pero que al contrario los países han actuado con "mayor crueldad" contra la naciones sancionadas.
"En el caso de Venezuela las medidas coercitivas unilaterales no solo afectan a nuestro pueblo sino a varios Estados del Caribe a través de Petrocaribe, gran iniciativa del comandante Hugo Chávez [expresidente 1954-2013] que no ha podido aportar al desarrollo dada las medidas restrictivas", sostuvo.
El Gobierno venezolano pidió en reiteradas ocasiones a Estados Unidos levantar las sanciones, que le impiden la compra de medicamentos para atender a los ciudadanos de esa nación.
Por otra parte, el canciller manifestó que se debe garantizar la actividad del turismo afectada por la pandemia, pero sin poner en riesgo la vida de los ciudadanos.
En Venezuela se registran 3.484 personas contagiadas por COVID-19 y un total de 28 muertos desde que se detectaron los dos primeros casos el pasado 13 de marzo.