Tranquilo y con una entereza envidiable. Así, Juan Carlos Unzué ha afrontado la que, seguramente, era la rueda de prensa más dura de su vida. Bajo el techo del Auditori 1899 del Camp Nou, el técnico ha convocado a los medios de comunicación para anunciar que sufre esclerosis lateral amiotrófica, más conocida como ELA. "Solo quería deciros que tengo ELA. En mi caso está afectando a mis extremidades, brazos, manos y piernas de forma simétrica. A día de hoy es una enfermedad sin tratamiento ni cura excepto unas pastillas que a la mayoría de pacientes nos ayuda a ralentizar la progresión de la enfermedad", ha comenzado Unzué.
Un problema de salud por el que abandona la que ha sido la profesión de toda una vida: el fútbol. El exjugador se ha mostrado agradecido por todo lo que le ha dado el deporte, sin embargo, es el momento de empezar un nuevo ciclo. Uno al lado de los pacientes con ELA.
"Mi etapa como entrenador ha finalizado. Voy a firmar por un equipo modesto, pero muy comprometido. El de los pacientes de la ELA", ha asegurado.
El que fuera portero del Barcelona ha destacado que ahora su objetivo es dar visibilidad a la enfermedad que padecen él y otras miles personas en España. "Somos unos 4.000 en el equipo que tiene un mercado de fichajes muy activo por desgracia. Cada día fichamos a tres y perdemos a tres", ha lamentado Unzué.
No obstante, un nuevo once que le ha ayudado mucho. Ha hablado de referentes, como José Robles, Jorge Murillos o Carlos Matallanas, periodista deportivo. Los tres sufren la misma enfermedad que Unzué, quien se ha comprometido a "intentar mejorar la calidad de vida de los compañeros de equipo junto a la Fundación Luzón", a la vez que ha pedido un mayor apoyo a la investigación de esta dolencia. El ya exentrenador ha querido recordar que el próximo domingo 21 de junio es el Día mundial de la ELA, fecha en la que se invitará a "teñir de verde a los edificios deportivos de este país".
Un clásico del fútbol español
El navarro no solo ha estado acompañado de periodistas, sino también de compañeros. Junto a él han estado el entrenador de la selección española, Luis Enrique; los jugadores azulgranas Gerard Piqué, Jordi Alba, Sergio Busquets y Sergi Roberto; el presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu; el exfutbolista Carlos Puyol o el técnico del Barça, Quique Setién.
El Barcelona se ha querido volcar con el que fue cancerbero de su portería y parte del equipo técnico del club. Cariño que llega también desde todos los rincones del país e instituciones del fútbol nacional.
Desde el @RCDEspanyol queremos transmitir nuestra fuerza y ánimo a Juan Carlos Unzué y a todas las personas que luchan contra esta dura enfermedad.
— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) June 18, 2020
Todo nuestro apoyo y cariño para el ex entrenador celeste Juan Carlos Unzué en su lucha contra la ELA. La "afouteza" de la familia celeste estará contigo para superarlo. ¡Fuerza, míster! pic.twitter.com/pzJfRZtuUP
— RC Celta 💙 #CandoHaiPaixón (@RCCelta) June 18, 2020
Estamos contigo en estos duros momentos, Unzué.
— LaLiga (@LaLiga) June 18, 2020
No pierdas nunca tu sonrisa. pic.twitter.com/N2lIvhrKzR
“Hoy es un gran día porque todos los que estamos aquí nos hemos podido levantar”.
— Jordi Cruyff (@JordiCruyff) June 18, 2020
Ojalá escucháramos todos los días ejemplos como el de Juan Carlos Unzué para darnos cuenta de lo afortunados que somos.
¡Mucho ánimo, Juan Carlos! Y un fuerte abrazo a todos los que sufren ELA. pic.twitter.com/A4uI1X2wsF
Y es que Unzué es uno de los clásicos del fútbol español. Debutó con 19 años como portero del Osasuna, equipo de su Pamplona natal. Rápidamente llamó la atención del Barcelona, equipo en el que estuvo dos años, antes de ser fichado por el Sevilla en 1990. En el equipo andaluz vivió sus mejores años, siete como titular indiscutible de la escuadra sevillista y como un auténtico ídolo del Nervión. En 1997 saldría de la capital hispalense en dirección al Tenerife, luego al Oviedo y daría por finalizada su carrera como portero en 2003 donde empezó: bajos los palos del Osasuna.
Sin embargo, la retirada de Unzué no se tradujo en su desaparición de los campos. Pronto comenzó su aventura en los banquillos, en concreto, en el Camp Nou. Bajo la dirección de los técnicos del Barcelona Frank Rijkaard y Pep Guardiola, el navarro preparó a los guardametas de Can Barça. En 2010, tendría su primera experiencia como primer entrenador en el Numancia. Sin embargo, su labor como técnico se vería potenciada por su colaboración con Luis Enrique. En 2013, acompañó al asturiano en el Celta y luego sería su segundo entrenador en el Barcelona. El tándem conseguiría dos Ligas, tres Copas del Rey y una Liga de Campeones en solo tres años, uno de los mejores periodos de la historia azulgrana. Su trabajo con Luis Enrique le colocaría en primera línea futbolística y dirigiría a Celta y, por último, a Girona.
En 2019, Unzué se despidió del equipo catalán. Su nombre sonaba como futuro ayudante de Luis Enrique en la selección. Una dupla que, por culpa de la ELA, no se volverá a ver sobre el terreno de juego. Lo dicho, un clásico del fútbol español.