Este cortometraje de unos ocho minutos, creado por Claude Lelouch, es considerado por los amantes del motor como uno de los mejores vídeos de conducción de todos los tiempos.
Ahora, Lelouch y Ferrari han vuelto con la segunda entrega del cortometraje, llamada Le grand rendez-vous. Los protagonistas de esta entrega: el piloto de Fórmula 1 de la Scuderia, Charles Leclerc, y el superdeportivo híbrido Ferrari SF90 Stradale, con una potencia de 1.000 caballos.

El escenario también ha cambiado: en lugar de París el nuevo vídeo se grabó en Mónaco, y para ser más precisos, en las calles que forman el circuito de carrera de Fórmula 1.
En algunos de los trayectos el bólido alcanza la imponente velocidad de 240 km/h, lo cual es incluso intimidante en unas estrechas calles monagescas.
Curiosamente, en la creación de esta obra participaron tan solo 17 personas, que usaron seis iPhone 11 Pro, nueve GoPro, y una cámara Sony Venice. El vídeo se grabó justo cuando tendría que haberse celebrado el Gran Premio de Mónaco, si este no se hubiera cancelado debido a la pandemia.
En cierta medida, la cuarentena hizo posible que se grabara este vídeo, puesto que dejó las calles del reino prácticamente desiertas. Ferrari asegura que durante el proceso de producción se cortaron las calles, pero en algunas de las escenas se puede ver a transeúntes por las aceras.
Un detalle curioso del vídeo, es que la florista que aparece al principio y al final es la nieta de Lelouch.