El teletrabajo se ha convertido en la cotidianidad de la nueva normalidad desde que comenzó la pandemia de COVID-19. La posibilidad de implementarlo de manera definitiva para muchas empresas es algo que está siendo evaluado, y algunos estudios indican que puede hacerse realidad.
En España, por ejemplo, la empresa Linkedin realizó una encuesta a 2.000 personas en régimen de home office, en la que un 53% sostuvo haber tenido más tiempo de calidad en familia gracias a la modalidad.
El teletrabajo se consolida cada vez más como una opción viable para articular la vuelta a la normalidad en las empresas. ¿Qué aspectos positivos has experimentado con el teletrabajo? pic.twitter.com/WLZ6Ww2LYR
— LinkedIn España (@LinkedInES) May 18, 2020
Aproximadamente un 30% afirmó sentirse más productivo y creativo en su trabajo realizándolo desde su casa. Sin embargo, a la hora de consultar respecto a las desventajas, un 62% admitió que se siente más ansioso y estresado desde que trabaja de este modo.
Además, 18,53% de las personas encuestadas admitieron estar asustadas; el 14,99%, confundidas y solo 18,37% se consideran preparadas para la situación.
Más del 70% de los encuestados está trabajando desde sus casas. Consultados por cómo se sienten respecto al aislamiento social y al encierro, las respuestas predominantes fueron ansiedad (44,50%), sobrecarga de actividades (40,85%) y, en tercer lugar, cansancio (38,50%).
Por su parte, la Universidad de Chicago, Estados Unidos, realizó un estudio en 86 países en el que se analizó cuál es la capacidad que tiene cada uno de implementar el teletrabajo. Según el informe, Luxemburgo ocupa el primer lugar: 53,4% de los puestos de empleo pueden implementar el home office. Los siguientes 9 mejor evaluados, con cifras que rondan el 45% en todos los casos, son Suiza, Suecia, Reino Unido, Bélgica, Noruega, Islandia, Malta, Estados Unidos y Holanda. El último en el ranking es Mozambique con un 5,24% de posibilidad.