"Se necesita un alto compromiso, coraje y un sentido de urgencia para dejar de lado las diferencias políticas e ideológicas para llegar a un acuerdo para proteger la vida de las personas, esa es precisamente la naturaleza del acuerdo de colaboración que se firmó en Venezuela", agregó Etienne.
Este pacto para atender la pandemia por COVID-19, destaca la directora, se logró luego de múltiples diálogos y negociaciones facilitados por la OPS tanto a nivel técnico como político.
La OPS ratificó su compromiso de continuar apoyando la asistencia en el área de salud a la población venezolana y también la cooperación técnica para el acuerdo.
Además, aseguró que aunque esta enfermedad ha traído numerosos problemas a la mayoría de los países, también es una posibilidad "de utilizar la salud como un puente para la paz".
En el documento se acordó brindar prioridad al acceso a los equipos de protección para el personal de salud y a las medicinas e insumos para tratamientos, descentralizar las pruebas diagnósticas y aunar esfuerzos para la atención en los estados más afectados.
Respecto a los servicios de salud, destacaron la protección del personal sanitario y la implementación de acciones de prevención y control de infecciones en los establecimientos de salud.
Además acordaron la vigilancia epidemiológica con el análisis de información y reportes de situación, así como la comunicación de riesgos para que la población adopte medidas de prevención y cuidado.
A través de este acuerdo se logró que el Banco de España transfiriera a la OPS los recursos de Venezuela que mantenía bloqueados.