El tema imperante desde el inicio de la pandemia de COVID-19 ha sido la salud desde todos sus ángulos. Ya sea acerca de los daños que causa el nuevo coronavirus o sus consecuencias colaterales psicológicas, la comunidad científica se ha dedicado a investigar toda clase de aspectos de la salud humana en estos tiempos.
Por ello, conocer cómo funciona la producción de la vitamina D en el cuerpo humano, cuáles son sus funciones y si podemos recibirla sin estar necesariamente al aire libre, son interrogantes relevantes a abordar para cuidar nuestra salud durante estas particulares circunstancias de encierro.
¿Para qué sirve la vitamina D?
La vitamina D es necesaria para mantener fortalecido el sistema inmunitario. De hecho, varias investigaciones indican que se trata de una aliada indispensable para el combate de la pandemia por coronavirus.
Permite el desarrollo de calcio y fósforo en el cuerpo, lo que influye en la salud de los músculos, huesos y dientes. La falta de vitamina D puede provocar desde la sensación de fatiga y cansancio hasta el desarrollo de enfermedades como osteoporosis, e incluso depresión.
Cómo la producimos
La principal fuente de producción de vitamina D es la luz solar a través de sus rayos UVB, en un proceso en que participan el hígado y los riñones. Según la Universidad Médica de Harvard, Estados Unidos, hay seis factores que influyen en la producción de la vitamina.
- Cuanto más lejos vives del ecuador terrestre menor es el desarrollo de vitamina D en invierno.
- Las partículas de la quema de combustibles fósiles presentes en el aire absorben los rayos UVB solares, por lo que llegan menos a las personas, por ende, a menor contaminación más vitamina D.
- El color de la piel es otro factor relevante, ya que a mayor melanina hay más resistencia para la absorción de estos rayos, por lo que una persona negra necesita más horas de exposición para producir la misma cantidad de vitamina que una blanca.
- El uso de protector solar, usado para bloquear la radiación que puede generar quemaduras o cáncer de piel a largo plazo, naturalmente dificulta la producción de vitamina D.
- Peso: aunque la grasa absorbe más cantidad de rayos UVB, en personas obesas los niveles de vitamina D suelen ser bajos, ya que el organismo tiene dificultades para procesarlo.
- Por último, hay una relación directa entre la juventud y la producción de vitamina D: cuanto más joven es la persona, más sencillo será producirla.
¿Recibimos los rayos UVB a través de una ventana cerrada?
Los rayos ultravioletas solares del tipo A atraviesan sin dificultades los vidrios de los autos o de las ventanas. Sin embargo, los del tipo B (UVB) no pueden atravesarlos. "No importa si es verano o invierno, no vas a generar nada de Vitamina D sentado frente a una ventana", sostuvo al New York Times el psicólogo y biofísico de la Universidad de Boston Michael Holick.
Afortunadamente, según indica, hay varios alimentos que son fuente de vitamina D, y cuando ello no es suficiente, existen suplementos vitamínicos para quienes no pueden generarla.