En México, la historia del crimen organizado está tapizada por una serie de personajes sin identidad verificable. Con singulares sobrenombres, decenas de criminales pasan a formar parte del imaginario colectivo sin siquiera saber nada de ellos. Ese es el caso del Ruso, uno de los operadores del Cartel de Sinaloa, de la fracción comandada por Ismael el Mayo Zambada.
"Gonzalo puso a una persona al que llamaban el Ruso a cargo de la operación de Sonoyta. Yo no sé el nombre real del Ruso y nunca lo conocí en persona. Adicionalmente a estas responsabilidades en Sonoyta, el Ruso también tenía un equipo de 20 a 30 pistoleros bajo sus órdenes", dice el testimonio recogido por la periodista Anabel Hernández en su libro El traidor.
La identidad del Ruso
El nombre real del Ruso es Jesús Alexánder Sánchez y desde 2014 hay una causa criminal en su contra en la Corte del Distrito Sur de California; además, de una orden de arresto que hasta ahora continúa vigente.
Gracias a la revelación de Vicentillo, el Gobierno de Estados Unidos pudo ubicar al Ruso e imputarle delitos relacionados con el tráfico de drogas.
El 'Ruso' después del Culiacanazo
Después de que el pasado 17 de octubre presuntos miembros del Cartel de Sinaloa tomaran las calles de Culiacán para impedir la detención de Ovidio Guzmán López, esta organización ha sufrido divisiones.
La nueva guerra interna del Cartel de Sinaloa surgió cuando en noviembre pasado un comando de ocho camionetas clonadas de la Policía Estatal de Sinaloa entró a una zona dominada por Ismael Zambada, a Agua Caliente, al norte de Culiacán, que está a cargo del Ruso.
Esta discusión derivó en un nuevo enfrentamiento entre las huestes de los Chapitos y las del Mayo Zambada; es decir, entre Néstor Isidro García —alias el Nini— y Jesús Alexánder Sánchez —el Ruso—.
Con esto, el Ruso recuperó su antiguo estamento como jefe de operaciones contra los enemigos del Cartel de Sinaloa. Pues, según relató Vicentillo, el Ruso tiene a su mando alrededor de 30 pistoleros para enfrentar a los enemigos.