Esta iniciativa —convocada por las organizaciones Frente Nacional Ciudadano, Frente Nacional Anti-AMLO (FRENAA) y el Congreso Nacional Ciudadano— se reprodujo en los estados de Morelos, Oaxaca, Guerrero, Veracruz, Chihuahua y Quintana Roo. El 1 de junio, López Obrador comentó al respecto que los que participaron en la marcha están en su derecho a manifestarse.
Expertos consultados por Sputnik subrayaron que cualquier movimiento de oposición que busque consolidarse en los próximos meses deberían apuntar a los escenarios legislativos y electorales.
"Si realmente lo que la oposición quiere es mandarle un mensaje fuerte al presidente, tendrá que pensar en los procesos electorales y de revocación de mandato en 2022. Ese sería el reto más importante para una verdadera y legítima oposición", consideró Édgar Ortiz Arellano, académico en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Pese a ello, ambos analistas coincidieron en que actualmente se vislumbra un panorama complejo para la consolidación de un movimiento serio contra López Obrador, que goza de mayoría de aprobación.
"Hemos visto que cada vez hay mayor número de movimientos que su bandera es la destitución del presidente de la república y estar en contra de todas las políticas públicas que está dirigiendo el Gobierno actual. Sin embargo, no veo la posibilidad de que alguna de éstas se consolide como una fuerza política importante para contrarrestar los efectos de las posibles acciones del Gobierno", comentó Édgar Ortiz.
Sin embargo, Ortiz Arellano resaltó la falta de empatía con los problemas de la mayoría de la población como la clave para explicar la debilidad del posicionamiento de los opositores a López Obrador, que, según el academico, de momento no representan una amenaza real para el Gobierno actual.
"Tenemos un país con 60 millones de personas que viven en la pobreza y, de esas, todavía un tercio viven en extrema pobreza. La oposición no ha dado soluciones para resolver ese problema", enfatizó.
Como muestra, recordó que sus estrategias se han limitado a posicionamientos en redes sociales, muchos de los cuales no abordan o presentan soluciones a grandes problemas sociales como la pobreza.
"Tendrían que hacer un reacomodo en la comunicación política. Si vemos la manifestación del 30 de mayo, muchos no recordaremos ni siquiera lo que estaban proponiendo, pero sí sabemos que andaban en carro (evidentemente es una posición de clase) y que alguien que iba en el transporte público (evidentemente de clase media-baja, baja) les grita que quien mueve al país son los obreros", comentó.
“Los obreros movemos a México, ridículos”, grita hombre a manifestantes, quienes hicieron la protesta contra el Ejecutivo Federal desde la comodidad de sus automóviles y motocicletas#GraciasHugoGatell #AMLODimiteYA #AMLOseVA #AMLOesTodos pic.twitter.com/6luz1uGgNy
— Víctor Hernández (@victorhdzmunoz_) June 1, 2020
Subrayó que para formar un frente la oposición tiene que generar un discurso que abarque todas las banderas sociales o, por lo menos, las de la mayoría porque esto sería el camino de activismo "con miras hacia el proceso electoral del próximo año, para que esta gran oposición tuviese poder en la Cámara de Diputados y, por lo tanto, en la forma de diseñar las políticas públicas".
"Sí, por un lado, hay grandes marchas y no se están reflejando en votos, entonces nos da un indicador de que, en realidad, son facciones que están defendiendo intereses muy particulares", comentó.
A su vez, Enrique Gutiérrez Márquez destacó que a los partidos políticos opuestos al Gobierno de López Obrador les falta pensar en habilitar puentes de interlocución en los escenarios políticos formales, como el Congreso.
El académico de la Universidad Iberoamericana también subrayó que las organizaciones civiles opositoras si quieren conseguir algo deberían ir más allá de las redes sociales para consolidarse como opositores serios y responsables ante la ciudadanía.
"Es muy valioso estar en redes sociales, que las cámaras de comercio y los grupos empresariales se manifiesten en el espacio público. Pero en donde se debaten las iniciativas de ley es en los espacios legislativos. Donde se discuten estas iniciativas, las implicaciones, modificaciones, incluso con el Ejecutivo y sus Secretarías, es en el espacio legislativo. Creo que se lo han tomado muy poco en serio los grupos de oposición y están muy metidos en la parte mediática", lamentó.
Finalmente, Édgar Ortiz destacó la importancia de que los movimientos de oposición se consoliden en las democracias modernas.
"En todas las democracias sanas, la oposición al Gobierno es indispensable para evitar los abusos del poder, para denunciarlos y para hacer expresión de todos aquellos ciudadanos que, de alguna u otra forma, no se identifican con el Gobierno y sus políticas. Que la oposición ejerza su derecho a la libre expresión, a tener diferentes opiniones, y que exista en el ambiente político la tolerancia a esa expresión, es un signo de que es una democracia sana y no hay visos de regresiones autoritarias", explicó.