"Está muy claro para Venezuela, y creo que hoy empieza a estar claro en otras partes del mundo, que el interés de los Estados Unidos es provocar una hambruna en nuestro país, es asfixiar económicamente a Venezuela, creo que hoy (…) en esta situación de la gasolina y en medio de la pandemia es sumamente claro", afirmó.
Las reservas de gasolina de Venezuela están en estado crítico y desde mediados de marzo el racionamiento, que desde hace casi dos años se aplica en el interior del país, llegó a Caracas.
Sin embargo, Estados Unidos ha amenazado con atacar los seis buques iraníes que intentan llegar a costas venezolanas y ha recibido una respuesta tajante del Gobierno persa.
Las autoridades de Irán dijeron que tomarán medidas drásticas si la "piratería marítima" de la Casa Blanca amenaza a sus buques petroleros durante el transporte de combustible a la nación caribeña, por lo que a juicio de Daza cualquier acción de Estados Unidos podría generar una situación compleja en el mundo.
"Esto representa por supuesto un momento muy delicado en las relaciones internacionales (…) la República Islámica de Irán ha dicho con toda claridad que esos barcos van a llegar. Si ocurriese que las fuerzas militares de Estados Unidos, interrumpen la llegada de los barcos que son de comercio, estaríamos frente a una situación extremadamente grave en el Caribe, en el continente y en el mundo", agregó.
Daza indicó que cualquier acción de Estados Unidos contra los buques persas constituiría una grave violación al derecho internacional y repudió que un país pretenda impedirle a Venezuela la compra de gasolina, mientras escasea en el país.
"Cómo entender que un Gobierno pretenda impedir que se haga una contratación para traer gasolina, cuando no tenemos gasolina, y sabemos que no tenemos por el robo de CITGO (filial de Venezuela en EEUU cuya administración fue cedida por la Casa Blanca a la oposición), el bloqueo ha afectado a nuestra industria y en tercer lugar porque el bloqueo financiero que hay sobre nuestro país afecta al conjunto de muestro país", expuso.
A Venezuela, consideró el vocero del PSUV, le están aplicando una especie de "fundamentalismo agresivo", por lo que espera que la Casa Blanca tenga un gesto de cordura y abandone esa decisión de seguir atacando cualquier actividad comercial de su país.
Sin embargo, en los últimos años las medidas han perjudicado la comercialización de petróleo que es la principal fuente de ingresos de Venezuela, la compra y producción de gasolina, la adquisición de equipos y servicios para las industrias básicas, e incluso la compra de alimentos y medicamentos.