"Decidimos retirar las fuerzas en todos los frentes en Trípoli a una distancia de 2-3 kilómetros para aumentar el espacio en la región de Trípoli para el culto y visitas, así como (estrechar) los lazos entre los libios, lo que pasa actualmente en el norte, este y oeste del país", dice la declaración de Al Mismari publicada en su cuenta de Facebook.
El ENL planea retirar las fuerzas a partir del mediodía del miércoles y espera que el Gobierno de Trípoli siga su ejemplo "para evitar el derramamiento de sangre en el fin del Ramadán".
El Ejército de Haftar lleva a cabo más de un año una ofensiva contra Trípoli, la capital Libia, que sigue siendo controlada por el Gobierno de Acuerdo Nacional, avalado por la ONU.
Libia continúa sumida en una crisis desde que la caída del que fuera su líder durante décadas, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales.
Actualmente en el país hay una dualidad de poderes: el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del ENL, y el Gobierno de Acuerdo Nacional, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.