Este proyecto se fundamenta en un ensayo titulado La nueva política económica en los tiempos del coronavirus, donde se expone un nuevo modelo de país a partir de cinco principios o valores fundamentales: democracia, justicia, honestidad, austeridad y bienestar.
"Debemos dejar el camino trillado de las últimas cuatro décadas y buscar uno del todo nuevo. Es indispensable desechar las recetas de siempre, propuestas por organismos financieros internacionales, supuestamente, orientadas a revertir las crisis", se afirma en la introducción del documento.
En términos generales, el documento inicia explicando lo que se entiende por cada uno de los ejes de la nueva política económica.
Democracia
Sobre la democracia, por ejemplo, se resalta la importancia de respetar el mandato del pueblo, así como la separación de poderes y el pacto federal.
"(…) estamos avanzando en la construcción de una democracia participativa en la que el poder político sea ejercido por el pueblo mismo. De ahí nuestro empeño en instituir la revocación de mandato y revocar los fueros e inmunidades de los servidores públicos. Más aun, consideramos que la sociedad debe participar de manera activa no solo en la decisión de los asuntos nacionales sino también en la administración de los recursos públicos, y gozar de libertad para ejercer en la forma que considere conveniente los que se destinan a la mejoría de sus entornos inmediatos", se expone en el ensayo.
Justicia
Al hablar de justicia, La nueva política económica en los tiempos del coronavirus inicia recordando que el modelo neoliberal sólo benefició a las minorías y generó miseria y violencia. Del mismo modo, resalta que la separación entre poder económico y poder político se está consolidando y, como muestra, recordó el reciente conflicto entre la presidencia y el sector empresarial.
En su lugar, aseveró que se ha preferido fortalecer la capacidad de consumo de las clases populares, a fin de obtener beneficios que, posteriormente, se extenderán hacia los sectores de mayores ingresos.
Honestidad
Sobre la honestidad, se destaca el esfuerzo del Gobierno para combatir la corrupción, una variable que se afirma es la principal responsable del fracaso del neoliberalismo.
"(…) Nada ha dañado más a México que la deshonestidad de los gobernantes y la pequeña minoría que ha lucrado con el influyentismo; esa es la causa principal de la desigualdad económica y social y, por extensión, de la inseguridad y de la violencia que padecemos", se expone en el ensayo.
Posteriormente, el documento se centra en el fraude fiscal y destaca las políticas para mejorar la recaudación de impuestos, en particular de las grandes corporaciones nacionales y extranjeras. Se destaca que esto, a la par del combate a la corrupción, son claves para liberar recursos que pueden destinarse al "desarrollo y bienestar del pueblo".
"Se trata, pues, de convertir la honestidad en forma de vida y de Gobierno: contrario a lo que sostenían los políticos del neoliberalismo de que la corrupción era parte de la cultura del pueblo de México, nosotros postulamos que la mayor riqueza de México es la honestidad de su pueblo", comenta el ensayo.
Austeridad
Para la austeridad, La nueva política económica en los tiempos del coronavirus recupera la idea de Benito Juárez sobre la importancia de que los funcionarios públicos no se enriquezcan a costa de sus cargos. Con esa idea, el documento recupera la propuesta presidencial para reducir progresivamente el salario de los altos funcionarios.
Del mismo modo, anunció la postergación del gasto del Gobierno, con excepción de 38 programas prioritarios, entre los que destacan la Guardia Nacional, el Aeropuerto en la base de Santa Lucía (General Felipe Ángeles), la producción petrolera, la rehabilitación de las seis refinerías del país, además de la construcción de la refinería de Dos Bocas y del Tren Maya.
Bienestar
Por último, sobre el rubro de bienestar, el ensayo reitera que el objetivo de la nueva política económica se centra en "establecer un Estado de bienestar igualitario y fraterno", a fin de garantizar el acceso a todos los servicios básicos a la población económicamente vulnerable.
Para finalizar, La nueva política económica en los tiempos del coronavirus reitera la importancia de vincular los cinco principios ya mencionados para fortalecer los valores de la sociedad.
"No olvidemos que nada sustituye a la felicidad y que la felicidad no consiste en obtener bienes, riquezas, títulos, fama, lujos, sino en estar bien con nosotros mismos, con nuestra consciencia y con el prójimo".