En 2019, según Lapola, la deforestación aumentó en un 85%, llegando a más de 10.000 kilómetros cuadrados, que es aproximadamente igual al área del Líbano. Este año se talaron 1.202 kilómetros cuadrados de bosques.
El coronavirus se está extendiendo actualmente en la Amazonía. Según Vatican News, las reservas de oxígeno en los centros médicos en el Manaus brasileño y el Iquitos peruano están casi agotadas, razón por la cual muchos pacientes en estado grave simplemente regresan a casa para morir, porque no los pueden ayudar en los hospitales.
Además, el río Amazonas con afluentes, que es el principal corredor de transporte para la población que vive a lo largo de los ríos, incluidas las tribus indias que están al borde de la extinción, sirve como transmisión del coronavirus, ya que el movimiento a lo largo de él prácticamente no está controlado de ninguna manera.