"Los más de 30.000 profesionales cubanos de la salud presentes hoy en disímiles países de África, Medio Oriente, Asia, América Latina y el Caribe; enaltecen a diario a Cuba. Los guía su vocación solidaria y humanista. Defienden la salud como un derecho humano", escribió el titular cubano de Exteriores en su cuenta de la red social de Twitter.
Los más de 30 000 profesionales cubanos de la salud presentes hoy en disímiles países de África, Medio Oriente, Ásia, América Latina y el Caribe; enaltecen a diario a #Cuba.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) May 7, 2020
Los guía su vocación solidaria y humanista. Defienden la salud como un derecho humano.#CubaSalvaVidas pic.twitter.com/UzZULW0zQ8
Entre estos colaboradores sanitarios cubanos, destacan las 24 brigadas del Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias "Henry Reeve", que laboran en 23 naciones en el enfrentamiento a la pandemia provocada por el nuevo coronavirus, causante de la enfermedad COVID-19, y que hasta ahora ha provocado la muerte a más de 247.000 personas en el mundo.
También los médicos cubanos trabajan en 15 naciones del Caribe, con presencia en Curazao, Guyana, Surinam, Bahamas, Jamaica, Haití, República Dominicana, Antigua y Barbudas, Barbados, Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, y Trinidad y Tobago.
En África, la colaboración médica de la isla alcanza a 31 países: Argelia, Niger, República Árabe Saharauí Democrática, Mauritania, Cabo Verde, Gambia, Guinea Bissau, Guinea Conakry, Togo, Santo Tomé y Príncipe, Burkina Faso, Guinea Ecuatorial, Ghana, Chad, Gabón, Congo, Angola, Botswana, Namibia, Eritrea, Djibuti, Etiopía, Kenya, Seychelles, Uganda, Zimbabwe, Tanzania, Mozambique, Esuatini, Lesotto, y Sudáfrica.
Cuba ha rechazado las denuncias hechas por Estados Unidos, que acusa a La Habana de ejercer la "trata humana", y califica de "esclavos" a los médicos y profesionales de la salud que brindan sus servicios en varios países, acusaciones calificadas por el Gobierno cubano de calumnias y chantaje, para desacreditar la labor humanista de estos contingentes y promover la deserción de los médicos.
En contraste con las acusaciones y las campañas de descrédito emprendidas por Washington, el Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial dela Salud (OMS) otorgó a Cuba, en 2017, el Premio de Salud Pública en Memoria del doctor Lee Jong-wook; y la Unión Africana entregó en 2016 una placa de reconocimiento en la sesión final de la XXVI Cumbre de este organismo regional.
También, unos 25 miembros del Congreso estadounidense firmaron una carta que insta al Gobierno de su país que le permita a Cuba acceder a equipos médicos y la colaboración necesaria para combatir el COVID-19.
En la recién finalizada Cumbre virtual "Unidos contra la enfermedad COVID-19", convocada por Azerbaiyán, en su condición de presidente pro tempore del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL), el presidente cubano Miguel Díaz-Canel ratificó la voluntad de la isla en colaborar con todos los países que necesiten ayuda sanitaria para enfrentar la pandemia de COVID-19.