La enfermedad "impacta a las economías de América Latina y el Caribe a través de factores externos e internos cuyo efecto conjunto conducirá a la peor contracción que la región ha sufrido desde 1914 y 1930. Según las últimas estimaciones, se prevé una contracción regional promedio de -5,3% para 2020", indicó el organismo.
El organismo explicó en su informe que la enorme contracción de la economía solo puede ser comparable "si se retrocede hasta la Gran Depresión de 1930, cuando retrocedió un 5% o más aún hasta 1914, cuando cayó 4,9%".
Los principales golpes que asestó el virus en la región fueron:
- la reducción del comercio internacional,
- la caída de los precios de los productos primarios,
- la intensificación de la aversión al riesgo,
- el empeoramiento de las condiciones financieras mundiales,
- una menor demanda de servicios turísticos,
- una reducción de las remesas.
Como medidas urgentes, la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, explicó durante la conferencia de prensa de presentación del informe en Santiago de Chile que "es urgente acceder a recursos financieros con base en un apoyo flexible de los organismos financieros multilaterales".
En el desglose, el informe prevé que América del Sur se contraerá este año 5,2%, América Central caerá 2,3% y la economía del Caribe se reducirá 2,5%; el fuerte desplome de Suramérica se explica por la caída del 15% del valor de las exportaciones, debido a que los países de esta subregión del continente se especializan en la venta de bienes primarios.