"Desde el 23 de marzo al 7 de abril tenemos 27 sectores en Guayaquil, donde hemos vuelto a colocar y se han vuelto a robar los cables, y dejan grandes zonas sin conectividad", dijo Moncayo en la televisión pública Ecuador TV.
Con anterioridad, el 26 de marzo ya hubo otro robo de cables telefónicos, que dejó sin servicio a unas 4.600 familias de Guayaquil.
Moncayo dijo que el robo de cables es el problema más difícil que ha tenido que enfrentar CNT desde mediados del mes pasado, cuando el Gobierno de Lenín Moreno declaró la emergencia sanitaria para frenar la propagación del nuevo coronavirus.
Tras retirar el cobre de los cables telefónicos, los ladrones lo llevan a fundir en lugares clandestinos, de modo que a los miles de usuarios sin servicio se suma la contaminación ambiental.
Según los últimos reportes oficiales, la provincia de Guayas (oeste), cuya capital es Guayaquil, continúa como el epicentro de la enfermedad en el país, con 5.551 casos positivos.
Solo en Guayaquil hay 4.184 casos confirmados con COVID-19, es decir el 75% de la provincia del Guayas y un 53% de los casos confirmados en todo el país.