"Se han dado algunas medidas paliativas, que son bastante distantes de lo que esperaba el sector empresarial en su conjunto, que ha planteado medidas de reactivación mirando al mediano y largo plazo", dijo a Sputnik el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Gary Rodríguez.
"Si se prolonga la cuarentena, vamos a terminar con menos empresas trabajando y más gente en la calle, con riesgo de una eclosión social y hasta casos de asaltos a mercados, supermercados e inclusive camiones de abastecimiento", afirmó.
Por su parte, el gerente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia, Marcelo Olguín, dijo a reporteros este 15 de abril que los créditos gubernamentales "ayudan a contener los efectos de la emergencia, pero no parecen ser medidas que busquen una mayor actividad económica que sostenga el empleo en el mediano plazo".
Añadió que el sector empresarial ha demandado al Gobierno no solo medidas urgentes sino la definición de "una agenda de política económica para una reactivación general ante una crisis sanitaria cuyo efecto será más duradero de lo previsto".
El criterio de Olguín coincidía con declaraciones de expertos y otros líderes empresariales que advirtieron a Sputnik que la ayuda para pagar salarios impediría conflictos laborales inmediatos, aunque a costa de postergar la atención de problemas estructurales de la economía.
El crecimiento del Producto Interno Bruto de Bolivia se ralentizó notablemente en 2019, a una tasa de 2,22% anual, y sufriría una depresión de casi 3% este año, sin que se prevea una reactivación importante en 2021, según una proyección del Fondo Monetario Internacional.

Reiteró que el sector empresarial esperaba discutir con el Gobierno "un plan de escalonamiento de la cuarentena para evitar mayores secuelas al aparato productivo", que debería comenzar con "medidas urgentes de alivio tributario".
Jáuregui dijo que hasta el 80% de las empresas afiliadas a la CNC han reportado la posibilidad de aplicar despidos de personal y que casi 20% corren riesgo de no reanudar sus operaciones a corto o mediano plazo, como consecuencia del parón económico provocado por la pandemia.