"Por recomendación del comité científico que me asesora, la cuarentena continúa hasta el 30 de abril. En siete días a partir de mañana (miércoles) evaluaremos si es posible flexibilizar y abrir un poco la cuarentena en determinados lugares del país", dijo la gobernante en un mensaje por la televisión estatal.

La extensión de la cuarentena fue apoyada anticipadamente por casi todos los gobernadores regionales y municipales, donde la paralización forzosa de actividades y el aislamiento domiciliario tenían acatamiento dispar, con episodios de incumplimiento masivo, especialmente en ciudades importantes como Santa Cruz.
Anticipándose a la decisión gubernamental, las autoridades regionales de Santa Cruz acordaron con los mandos castrenses la militarización de esa ciudad, que arrancó este martes, para forzar al cumplimiento general de la cuarentena es ese departamento, que concentra la mitad de los casos positivos de COVID-19.
Los gobiernos departamentales de Oruro (oeste) y Potosí (suroeste) habían anunciado el fin de semana pasado que prolongarían hasta fin de mes la cuarentena en sus regiones, independientemente de la decisión nacional.

Áñez anunció también la creación de dos programas de crédito para las empresas privadas, con objeto de que puedan pagar salarios y crear nuevos empleos a corto plazo.
"Tenemos las ideas claras, es una lucha muy dura pero vamos bien (…), vamos a luchar contra el virus y vamos a recuperar la economía", afirmó.
La presidenta transitoria confió en que los tres bonos de alivio creados hasta ahora, que según aseguró llegarían a la mayoría de los 11 millones de habitantes del país, impulsarán la reactivación económica.