La emergencia sanitaria por la COVID-19 también está generando problemas de escasez y aumentos en los precios de productos básicos. En el caso de México la pandemia ocasionó incrementos de hasta el 20% en el costo de la tortilla durante el mes de marzo de 2020.
En consecuencia, el Gobierno de México anunció en la conferencia matutina del 30 de marzo de 2020, multas millonarias a quienes subieran los precios de productos de primera necesidad. Según expresaron las autoridades, hay recursos suficientes para el consumo nacional.
El presidente del Consejo Rector de la Tortilla Tradicional Mexicana, Sergio Jarquín Muñoz, explicó a Sputnik que el precio de la tonelada de maíz aumentó de diciembre a marzo más de 1.000 pesos (41 dólares). Pasó de 4.900 (204 dólares) a 6.150 pesos (256 dólares), por lo tanto, el costo de producción también presentó un aumento.
Debido a esta situación, el mismo 30 de marzo, Alberto Serna, dueño de una tortillería en la colonia Narvarte, subió el precio del kilo de tortilla de 13 pesos a 15 pesos.
Los acuerdos fallidos de SEGALMEX
Con el fin de garantizar el abasto de tortilla en el país, el 7 de abril de 2020, Seguridad Alimentaria de México —SEGALMEX— se reunió con responsables del sector de producción de tortilla para evaluar el Programa de Apoyo a la Soberanía Alimentaria de Maíz.
#Comunicado🗞️ | Sostiene Segalmex reunión de trabajo para evaluar Programa de Apoyo a la Soberanía Alimentaria de Maíz
— SEGALMEX (@Segalmex_Mex) April 8, 2020
🌐 https://t.co/1FWrR0kzqg pic.twitter.com/yMZgLtTKSd
En entrevista con Sputnik, Sergio Jarquín Muñoz señaló que los acuerdos a los que se llegaron durante la reunión con funcionarios de SEGALMEX fueron para garantizar el abasto y el precio de la tortilla durante el período de la contingencia.
"El dueño de Maseca, Juan González, hizo el ofrecimiento de que no va a aumentar el precio de la harina de maíz, que es la materia prima para las tortillas", dijo López Obrador durante la conferencia matutina.
En contraste, Jarquín Muñoz explica que esto contraviene con el programa que habían acordado el día anterior, el cual consistía en comprar 70.000 toneladas de maíz a SEGALMEX a un costo promedio para garantizar el abasto de tortilla en el país.
"Hasta el día de ayer llevábamos muy buenas negociaciones, muy buenas pláticas, hoy con la mañanera se da el lineamiento de que no se nos venda maíz a ninguna organización, esto derivado de que Maseca dice que no va a incrementar su precio", señaló Jarquín Muñoz.
Cabe destacar que la producción de la tortilla de mayor consumo en México es la que se obtiene del proceso de nixtamalización, que consiste en la cocción de maíz con agua y cal, y no de harina de maíz —el producto principal de Maseca—.
En consecuencia, el presidente del Consejo precisa que el sector de la tortilla no compra mucha harina, por lo tanto, la estabilización de los precios de Maseca no les beneficia del todo.
Sin embargo, considera que los anuncios de las autoridades se deben a las imprecisiones sobre el proceso de producción de la tortilla y no a malos manejos en los programas de soberanía alimentaria.
El abasto de tortilla en riesgo
En caso de que los acuerdos con SEGALMEX no se respeten o no se encuentren alternativas, el abasto y el costo de la tortilla seguiría en riesgo. Mientras se presiona a los productores para mantener los costos actuales, las comercializadoras de maíz siguen especulando con los precios.
Lo que sucedería, alerta, es que el costo de producción de tortilla se elevaría alrededor del 25% más de lo que se está incrementando en este momento. Por lo tanto, el costo del kilo de tortilla también tendría un valor mayor al actual e incluso podrían presentarse cierres de tortillerías.
En este sentido, el Consejo Rector de la Tortilla Tradicional Mexicana, junto con otras organizaciones del sector, hará un llamado en los próximos días para advertir sobre los riesgos en el aumento al precio del alimento más importante para los mexicanos.