"Si no hay coordinación, no podremos lanzar el periodo de recuperación, ni siquiera si tenemos una vacuna. Es más probable que nos enfrentemos a un periodo de recuperación de muchos años", advirtió Saadia Zahidi, directora ejecutiva del Foro Económico Mundial.
En una rueda de prensa de la Asociación de Corresponsales de las Naciones Unidas, celebrada en Ginebra, Zahidi resaltó que de momento la recuperación rápida de la economía es poco probable por dos razones: falta de coordinación internacional y el hecho de que el coronavirus afecta a cada país en un momento diferente.
"Si las relaciones entre empleadores y empleados se han deteriorado durante este tiempo, será mucho más difícil recuperarse, incluso después del levantamiento de las restricciones", explicó.
Sin empleo
La preocupación de la directora ejecutiva del Foro Económico Mundial no es para nada desacertada, pues ya se leen noticias alarmantes, como que la semana pasada en Estados Unidos más de 6,6 millones de trabajadores presentaron solicitudes de prestaciones por desempleo, según los datos publicados por el Departamento del Trabajo. Al sumar las últimas tres semanas, el acumulado se acerca a los 17 millones de pedidos de ayudas.
Otro tanto pasa en Alemania, donde casi 650.000 empresas se dirigieron a la Agencia Federal de Empleo con el fin de imponer una jornada laboral reducida a causa de la pandemia.
"Hasta el 6 de abril de 2020 casi 650.000 empresas se dirigieron a la agencia de empleo para reducir la jornada laboral", dice el comunicado del ente y agrega que "de este modo el número de entidades que planean imponer una jornada laboral reducida creció casi en un 40% frente a los índices de hace una semana".
Aunque la agencia no puede especificar cuántas personas serán afectadas por las medidas, si asegura que su número "será considerablemente mayor que en la crisis económica y financiera [2008]" cuando hasta 1,4 millones de personas fueron transferidas a la jornada laboral reducida.
Lufthansa se agita
Las compañías aéreas son de las más afectadas y atraviesan una enorme crisis por la pandemia del COVID-19, pues casi todos los vuelos han sido anulados. Entre ellas está Lufthansa —el mayor grupo aéreo de Europa por número de pasajeros—, que según informó su presidente, Carsten Spohr, en un vídeo a los empleados, pierde un millón de euros por hora, de sus reservas de liquidez.
El presidente de Lufthansa destacó que 7.000 empleados de la compañía están afectados por las medidas de reducción de costes que tienen que implementar, de ellos 1.400 en Germanwings.
Moscú también paga su cuenta
La pandemia del coronavirus cuesta a Moscú unos 31.000 millones de rublos (490 millones de dólares) al día, afirmó la diputada de la Duma de Moscú (asamblea legislativa) Elena Nikoláeva, citando un estudio del Instituto de Economía Urbana.
Añadió que "según los últimos estudios del Instituto de Economía Urbana, la pandemia cuesta a Moscú un 15% del PIB, es decir cerca de 31.000 millones de rublos al día".
Estas pérdidas están relacionadas con las medidas aplicadas para contener la expansión del coronavirus en Rusia. El presidente Vladímir Putin declaró la semana del 28 de marzo al 5 de abril como no laborable aunque retribuida, período que luego extendió hasta el 30 de abril, argumentando que el pico de la epidemia no se había superado.
El mundo se agita
Otro de los llamados de atención lo dio la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, quien recientemente advirtió sobre la salida de capital de los mercados emergentes en los dos últimos meses, con cifras que triplican a lo sucedido en igual período de la crisis de 2008.
"En los últimos dos meses, las salidas de capital de los mercados emergentes ascendieron a unos 100.000 millones de dólares, más de tres veces más que durante el mismo período de la crisis financiera global", dijo Georgieva en un comunicado del ente.
La ejecutiva subrayó que los países exportadores ahora sufren un doble golpe por la caída de los precios de materias primas.
Y como ya nadie escapa de esta pandemia que actualmente tiene incidencia en 185 países del mundo, el Banco Mundial advierte que el coronavirus provocará la primera recesión en 25 años en el África subsahariana, según su último informe sobre la región 'Pulso Africano'.
"El crecimiento en África subsahariana sufrió un impacto significativo del actual brote del coronavirus y se prevé que caiga drásticamente del 2,4% en 2019 a entre -2,1 y -5,1% en 2020, la primera recesión de la región en los últimos 25 años", dicen los expertos.
El informe indica que las pérdidas económicas provocadas por el coronavirus en la región oscilarían entre los 37.000 y los 79.000 millones de dólares.
El PIB caerá drásticamente en Nigeria, Angola y Sudáfrica y también se ralentizará el crecimiento económico en la Unión Económica y Monetaria de África Occidental (Benín, Burkina Faso, Costa de Marfil, Malí, Níger, Guinea-Bissau, Senegal y Togo) y la Comunidad Africana Oriental (Burundi, Kenia, Ruanda, Sudán del Sur, Tanzania y Uganda).
Los autores de 'Pulso Africano' recomiendan a los políticos de la región centrarse en salvar las vidas y proteger los sustentos de su población, fortalecer los sistemas sanitarios y reaccionar con rapidez para minimizar las interrupciones de las cadenas de suministros alimentarios.
Como advierte el texto del Banco Mundial, lo más importante son y serán los seres humanos con cuyo esfuerzo se podrá luego rescatar la menguada economía mundial, que como han vaticinado muchos, se recuperará si los distintos gobiernos y organismos ponen de su parte y aúnan esfuerzos para conseguir el bien mayor que es el bienestar de la humanidad.