La vaquita marina es el cetáceo más pequeño del mundo y habita las aguas del Alto Golfo de California, de las cuales es endémico.
"Durante la pasada administración, el número de ejemplares disminuyó hasta en 85%, revelando el fracaso para acabar con la pesca descontrolada e ilícita de la totoaba en la region, así como de los intentos por realizar su crianza en cautiverio", indicaron las organzaciones.
Hacen notar que desde 2019 se redujo en 30% el presupuesto destinado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), entidad responsable de la vigilancia en el Alto Golfo de California y, por lo tanto, de la preservación de la vaquita marina.
Recordaron que hace un año demandaron establecer una 'zona de cero tolerancia' para cualquier tipo de embarcación en la zona donde se registraba la mayor concentración de las últimas vaquitas de acuerdo al reporte científico, y que las autoridades pesqueras cumplieran con las promesas de generar artes de pesca que no interactuaran con la vaquita, pero nada se hizo.
Seis vaquitas marinas reavivan la esperanza de salvar al cetáceo endémico de México https://t.co/xylwCW94a6 pic.twitter.com/4ylEI6wgdh
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) October 17, 2018
En una recopilación histórica realizada por las organizaciones junto a The Ocean Foundation, se estimó que durante años las autoridades mexicanas han sido omisas en implementar medidas suficientes y eficaces para prevenir las amenazas para la supervivencia de esta especie.
Alejandro Olivera, del Centro para la Diversidad Biológica, afirma que el de la vaquita marina es el caso más emblemático, pero en México hay ya más de 50 especies perdidas y 2.600 más se encuentran en riesgo, además de que suman ya 450 las que se encuentran en peligro de extinción, si no se actúa para conservarlas.