Vladímir Putin alarga el periodo no laboral en Rusia hasta el 30 de abril por el coronavirus | Vídeo

"Según los especialistas virólogos, el pico de la epidemia todavía no ha pasado en el mundo, incluido en nuestro país", dijo Putin.

El presidente ha asegurado que la semana no laboral ha dado a Rusia el tiempo necesario para poner en marcha la lucha contra la epidemia. En ese sentido, ha decidido alargar es periodo no laboral hasta el 30 de abril incluido y, a la vez, conservar a los trabajadores su salario.

"Los órganos del Estado, los centros de salud y las farmacias y las tiendas de productos de primera necesidad seguirán abiertos", ha dicho, en referencia a este nuevo periodo no laboral.

El presidente ruso ha explicado durante su comparecencia que las regiones del país deberán decidir por su cuenta qué negocios y locales continuarán con su actividad durante este nuevo periodo excepcional que se abre. "La intensidad de las medidas en las regiones debe depender de la situación epidemiológica", ha constatado. También ha afirmado que se logrará proteger a los habitantes de mayor edad —el grupo de mayor riesgo— del coronavirus.

"Creo que es importante que, por lo general, logremos proteger a los ancianos de la grave amenaza e impedir los brotes de epidemia en guarderías, colegios, universidades y otros centros de educación", dijo Putin.

​En esta situación, ha advertido, lo importante es conservar el número de puestos de trabajo y los ingresos de los ciudadanos. "Las próximas medidas se adoptarán en función de cómo va evolucionando la situación de la pandemia en la Federación de Rusia. Es posible que se deba acortar el periodo no laboral".

El 25 de marzo Putin ya se dirigió a los rusos y anunció las primeras medidas a nivel nacional para luchar contra la pandemia y ayudar a los afectados, tanto directamente como indirectamente. Entre otras cosas, su Gobierno decretó que la primera semana de abril no sería laborable, recomendó a todos quedarse en casa y vio conveniente aplazar la votación sobre las enmiendas a la Constitución, inicialmente convocada para abril.

La comparecencia se produce un día después de que el presidente firmase una ley que otorga al Gobierno el derecho de decretar el régimen de emergencia en todo el territorio de Rusia. Dicha ley permite al Gobierno ruso decretar el régimen de alarma o de emergencia en todo el territorio o parte de él, así como establecer las reglas de comportamiento de carácter vinculante en caso de su declaración.

Restricciones en Moscú

Por su parte, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, prorrogó hasta el 1 de mayo todas las medidas restrictivas impuestas en la capital rusa debido a la pandemia.

"La situación más difícil con la propagación del coronavirus se da en Moscú; por lo tanto, todas las restricciones impuestas anteriormente se extenderán hasta el 1 de mayo de 2020", escribió Sobianin en su blog personal.

En este contexto, el alcalde pidió a los moscovitas que "tengan paciencia y coraje".

"Tendremos que pasar por tiempos difíciles", agregó. 

Asimismo, el funcionario aseguró que las autoridades de Moscú harán "todo lo posible e imposible para superar el problema para que el menor número posible de moscovitas sufra de coronavirus".

Violación del confinamiento domiciliario en Moscú

Serguéi Sobianin también firmó leyes para imponer multas a los ciudadanos que incumplan el régimen de alarma, incluido el confinamiento domiciliario obligatorio.

"El incumplimiento por parte de los ciudadanos de las normativas legales de la ciudad de Moscú encaminadas a introducir y garantizar el régimen de alarma en Moscú, incluida la violación del régimen de autoaislamiento (...) se castiga con una multa administrativa de 4.000 rublos" (unos 50 dólares), dice el documento publicado en el sitio web del alcalde.

En caso de reincidencia, los infractores deberán pagar otros 5.000 rublos (unos 65 dólares).

Si vuelven a violar las normas, los funcionarios y las personas jurídicas tendrán que pagar hasta 50.000 y 500.0000 rublos (650 y 6.500 dólares), respectivamente.

La semana pasada Sobianin anunció que a partir del 30 de marzo los moscovitas de todas las edades estaban obligados a cumplir el régimen de aislamiento domiciliario, que permite salir a la calle solo para ir a una tienda o una farmacia cercanas, o para recibir ayuda médica urgente y que obliga a mantener una distancia de al menos 1,5 metros con otras personas en el transporte y en otros lugares públicos.

Hasta la fecha en Rusia fueron registrados 3.548 casos de coronavirus, entre ellos 30 letales. La mayoría de los contagios, 2475, corresponden a la capital.