Según detalla un comunicado del Gobierno español, el avión despegó el 28 de marzo por la mañana desde la ciudad de Zaragoza y, tras una escala técnica, cargó el material sanitario en Shangái ya entrada la jornada del domingo 29.
El viaje de vuelta, cargado con más peso y por consiguiente con menos combustible, precisó de dos escalas en la ciudad siberiana de Novosibirsk y en Riga, Letonia.
Después de casi tres días de viaje y 33 horas de vuelo, el avión con el ansiado material aterrizó en la capital española.
Desde el arranque de la crisis del coronavirus los sanitarios españoles denunciaron de forma constante sufrir un desabastecimiento de equipos de protección.
Esto ha provocado que hasta la fecha más de 12.200 sanitarios hayan contraído con el virus en España, representando un 14,3 % del total de transmisiones registradas en el país.
Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, España cuenta con un total de 85.195 afectados y 7.340 fallecidos por el COVID-19.
El material sanitario llegado este lunes 30 a Madrid forma parte de diversos acuerdos alcanzados por el Gobierno con empresas de China para garantizar un flujo de suministro durante las próximas ocho semanas, unas compras cuya factura ya supera los 600 millones de euros.