El sector estima pérdidas de hasta 700 millones de euros, sobre todo ante las dudas existentes sobre la celebración de algunos de sus eventos más populares. De esta forma, la patronal de la tauromaquia pide al Estado una serie de medidas económicas que le permitan torear los daños provocados por el coronavirus.
Entre las propuestas de los taurinos se encuentra la rebaja del IVA de las entradas, petición hecha también por cines, teatros y salas de música. Además, piden que el Gobierno asuma el reembolso, con vales, de las entradas de los eventos cancelados por la alerta sanitaria. En cuanto a los trabajadores, exige una revisión de los criterios de cotización de los profesionales para que el descenso de la actividad no les impida cotizar.
De momento, el Ministerio de Cultura no ha dado ninguna respuesta a las reclamaciones, aunque el texto taurino ha removido a los partidos y asociaciones animalistas. Estos ven la crisis del coronavirus como un buen momento para dejar de apoyar una actividad que consideran "muerta y rechazada por la sociedad".
Desde Guadalajara Antitaurina rechazamos cualquier ayuda pública por parte del Ministerio de Cultura @culturagob para reflotar la hundida tauromaquia.
— Guadalajara Antitaurina (@gantitaurina) March 25, 2020
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Los grupos antitaurinos piden desde hace años el fin de la financiación pública a corridas y ferias con toros. Unos festejos que, al igual que el sector, van perdiendo cada año más peso. Y es que, con el paso del tiempo, los espectáculos taurinos van desapareciendo. Según los datos de Pentauro, organismo del ministerio del que dependen todas las actividades del sector, en 2018 su número descendió un 2% respecto a 2017. Una caída de actividad en las plazas de toros del 58% si partimos de los primeros datos de Pentauro, hace ya doce años.