"Nuestras embajadas y consulados alrededor del mundo trabajan al máximo de sus capacidades ante la imposición de medidas restrictivas nacionales y regionales muy distintas, así como la constante cancelación de vuelos y reducción de frecuencias en diversas rutas", dijo en un comunicado la secretaría de Relaciones Exteriores.
Las peticiones de apoyo se centraron inicialmente en el continente asiático, sin embargo, en días recientes las solicitudes de asistencia se concentraron en Europa y América Latina.
Otros puntos de tránsito y sitios turísticos en Medio Oriente y el norte de África también son foco de los pedidos de ayuda para el retorno.
"Se ha contado con el apoyo de diversos gobiernos, así como de aerolíneas y compañías de transporte, dentro de sus posibilidades de acción", detalla un comunicado emitido por la cancillería, que encabeza Marcelo Ebrard.
El Gobierno mexicano anuncia que "continuará brindando asistencia y protección consular a las personas mexicanas afectadas", y seguirá realizando "gestiones especiales en los puntos donde hoy existe menor conectividad".
El regreso de los turistas a sus hogares es un reto de todos los gobiernos en el actual escenario global, y la cancillería recomienda "evitar todo viaje internacional que no sea estrictamente esencial".
El Gobierno de México reafirma que respalda las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ante el COVID-19.
También hace un llamado a la comunidad internacional para cumplir las recomendaciones y "su cumplimiento de acuerdo con el Reglamento Sanitario Internacional", en alusión al cierre de fronteras que este país descarta, hasta la fecha.
México espera entrar en una fase de contagio comunitario local la próxima semana, cuando los casos podrían sumar centenares.
Desde el 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) califica como pandemia la enfermedad COVID-19 causada por la nueva cepa de coronavirus, SARS-CoV-2, que empezó a propagarse desde la ciudad china de Wuhan a finales de 2019.
Actualmente en el mundo son 191.127 casos confirmados de COVID-19, enfermedad que surgió en diciembre pasado en China, y 7.807 muertos, informó la OMS en su último reporte.