Llamado Stickleback, el barco se hundió el 28 de mayo de 1958 durante un ejercicio militar a 19 millas de la costa de Barbers Point, Oahu.
La nave perdió potencia durante el ejercicio, y comenzó a descender a las profundidades del mar. La tripulación intentó salvarla añadiendo un lastre de flotabilidad de emergencia que rápidamente llevó al buque a la superficie. Sin embargo, se estrelló contra el destructor escolta USS Silverstein que selló su destino.
Un equipo de rescate intentó llevar la nave de vuelta a la superficie, pero sus compartimentos se habían inundado haciéndolo imposible. Así que permaneció en el fondo del mar durante 62 años.
El Stickleback mide nos 95 metros de largo, alcanza 20 nudos en la superficie y 8 nudos bajo el agua.
Entró en funcionamiento el 29 de marzo de 1945, participó en las batallas de la Segunda Guerra Mundial, la guerra de Corea y la Guerra Fría. Desde 1951 sirvió como barco de entrenamiento en San Diego, California.
El submarino fue descubierto por el proyecto Lost 52, que se dedica a la búsqueda de buques y submarinos perdidos durante la Segunda Guerra Mundial.