Las cámaras térmicas pueden ser utilizadas para medir la temperatura corporal de las personas, detectar si tienen fiebre o febrícula (entre 37 y 38 grados Celsius) y, de ser así, aislarlas para confirmar si poseen coronavirus. Estas se usaron por primera vez en Singapur en 2003, con la epidemia del SARS, pero hoy poseen una tecnología superior y son más accesibles en costo.
La cámara utilizada para medir la temperatura corporal tiene una tecnología de doble lente: uno óptico que ve en color como el ojo humano y otro térmico que mide la radiación. A su vez, un sistema de fondo une estos datos mediante un doble chequeo.
"Esta nueva solución, que es bastante nueva, mide la temperatura en tres segundos, con un margen de error de 0,1 grado y toma más de una persona a la vez. Esto hace que podamos entregar una medición super específica", indicó Comeron.
Estas cámaras térmicas ya están presentes en aeropuertos y estaciones de subte en China y hace pocos días llegaron a Latinoamérica. Actualmente están realizando pruebas y entrenamientos de utilización de este producto en entes públicos y privados.
"La cámara nos provee una solución que podemos utilizar a distancia. No necesitamos que la persona se acerque a tomarse la temperatura con un medidor de frente, como estamos viendo ahora en varios aeropuertos. El personal puede estar resguardado en una oficina y en caso de que se detecte fiebre ir preparado para evitar un contagio", concluyó la vocera de Dahua Technology.