"Esto va a ser como lo de la gripe aviar, que se pasa y nos olvidamos", dice una conserje del Instituto Vallecas I, en el barrio del mismo nombre al sur de Madrid. En el mostrador, tres alumnos de 4ª de la ESO (Educación Secundaria Obligatoria) preguntan tímidamente qué va a suceder en las próximas semanas. "Bueno, como hemos hecho ya los exámenes…", reflexiona uno de ellos. Surgen las dudas en este centro después de que el gobierno de la Comunidad de Madrid haya suspendido las clases desde la guardería hasta la universidad durante 15 días a causa del coronavirus.
El Gobierno regional tomaba esa decisión después de que la cifra oficial de contagiados se triplicara —de 202 a 578— y de que el número de fallecidos aumentara de ocho a 17 en apenas 24 horas (el total de contagios en España es de 1.235, con 28 fallecidos). La medida adoptada concuerda con las acciones tomadas por Vitoria o La Rioja. Marisa González, jefa de estudios del Vallecas I creía que había que "normalizar" la situación. "Se está viendo todavía qué hacer", respondía en el pasillo de esta institución con 400 alumnos y unos 45 profesores, al lado de la entrada donde los curiosos interrogan a las responsables de administración.
Primaba la incertidumbre y cierto pasotismo. En el Centro de Enseñanza Secundaria Tirso de Molina —del mismo barrio y con más de 1.000 alumnos, según cálculos de la administración— varios alumnos charlaban en la puerta. Uno de ellos fumaba un cigarro y reconocía haber oído de pasada que iban a cancelar las clases. Otros dos compañeros coincidían: ninguno sabía nada más que les iba a tocarse permanecer en casa por dos semanas. Y de padres, aseguraban en la recepción, no han tenido visitas.
Tal comunicado era el que mostraban algunos estudiantes en el andén en dirección a la Universidad Autónoma de Madrid. Un correo parecido sostenía esta postura y R. M., trabajadora de 31 años de la administración de la facultad de Filosofía. "No sé nada. Como lo dijeron tarde, casi ni nos enteramos. Ha sido tan súbito…", afirma. “Supongo que estarán reunidos y nos comentarán algo más a lo largo de la jornada”, resumía.
ℹ Los centros docentes tendrán a su disposición la plataforma EducaMadrid y todas sus herramientas: aulas virtuales, mediateca educativa, comunidades virtuales, EducaMadrid Cloud, así como otras que pueda facilitar la Consejería de Educación y Juventud.
— Comunidad de Madrid (@ComunidadMadrid) March 10, 2020
Andrea Segarra, estudiante de segundo curso de Lenguas Modernas, Cultura y Comunicación, contaba cómo sus amigas no habían ido a clase y cómo pensaba seguir las clases por "la plataforma". "Tenemos un aula virtual y supongo que lo usaremos ahora", resoplaba. Como ella, Lorena Ramón, de 25 años, creía que sabrían más próximamente. "A mí y a mis compañeros de un máster de Investigación Lingüística nos tendrán que decir algo, porque acabábamos la semana que viene".
Enrique Ossorio, consejero de Educación, resolvía poco después algunas dudas una rueda de prensa en la Real Casa de Correos. Una de ellas es que, supuestamente, el equipo docente (salvo el de cero a tres años) tendrá que acudir con normalidad. "Lo que más le preocupa al Gobierno, después de la salud de las personas, es la calidad del sistema educativo", explicaba el consejero.
"Queremos dar todos los pasos para que no se pierda el servicio educativo durante todos estos días, y conseguir que el lunes se pueda considera que las clases se siguen dando a distancia", añadía Ossorio. "Es una tarea compleja, pero gracias a nuestros docentes, a las plataformas online, a los ofrecimientos de empresas que hemos tenido, pensamos que es posible que el lunes los alumnos puedan seguir la docencia con normalidad en sus domicilios".
Desinfección de transportes
La Comunidad de Madrid también notificaba que desinfectará a diario los vehículos destinados al transporte regular de viajeros. Lo revelaba a tenor de la Orden decretada el día 9 de marzo por la Consejería de Sanidad para evitar la propagación del coronavirus y se publicaba el día 10 en el Boletín Oficial de la Comunidad. La medida entrará en vigor a partir del día 11 y se aplicará en todos los trenes de Metro y Cercanías, estaciones, todo el mobiliario y autobuses, según la consejería. En principio no afecta al transporte discrecional (como taxis o VTC). Para la limpieza se usarán desinfectantes hidroalcohólicos recomendados por las autoridades sanitarias.