"Si me saco el premio de 20 millones de pesos, va a ser para becas, lo voy a entregar a estudiantes de escasos recursos", dijo el mandatario en el acto de lanzamiento del sorteo, durante su conferencia de prensa diaria.
El valor total de los premios asciende a 2.000 millones de pesos (unos 105 millones de dólares).
El 9 de marzo comenzarán a venderse seis millones de boletos, con costo de 500 pesos cada uno, para recaudar en caso de venta total, escenario que nunca ha ocurrido en la historia de la lotería mexicana, 3.000 millones de pesos (más de 157 millones de dólares).
El avión Boeing 787-8 modelo Dreamliner de lujo, adquirido por la Presidencia a principios de 2016, bajo arrendamiento financiero vigente y valuado en 130 millones de dólares, continúa en venta o en oferta de alquiler, pero en el último año no se ha consumado.
Símbolo de "derroche"
López Obrador afirmó que el avión tiene capacidad para distancias superiores a cinco horas de vuelo, y que no era necesario comprarlo durante la Administración de Felipe Calderón (2006-2012), aunque la entrega se realizó durante el mandato de Enrique Peña Nieto (2012-2018).
"En distancias relativamente cortas es más recomendable utilizar otros aviones, más pequeños, que valen mucho menos, que pueden ir inclusive a Europa sin recarga de combustible, en vez de "un palacio para los cielos", cuestionó el mandatario.
"Nosotros queremos un país en paz, en el que lucha por la justicia no tiene nada que temer", manifestó.
López Obrador dijo que la intención de sus antecesores al usar el avión fue "sentirse importantes; fantochería, prepotencia, los tiempos de los faraones, de las monarquías sexenales".
Un grupo de 75 empresarios se comprometió a mediados de febrero, durante una cena en el Palacio Nacional con el jefe del Ejecutivo, a comprar casi la mitad de los boletos de la rifa simbólica, aportando unos 79 millones de dólares.
Por razones legales, como el arrendamiento financiero firmado por la Presidencia con el fabricante Boeing, y la obligación de la Lotería Nacional a entregar premios en efectivo, el avión presidencial no se puede entregar como premio a los ganadores, como era la idea original de López Obrador.
También lo ofreció públicamente en trueque por equipo médico a sus homólogos Donald Trump, de EEUU, y Justin Trudeau, de Canadá, pero no tuvo respuesta.
La aeronave permanecerá bajo resguardo de la Fuerza Aérea Mexicana, con la intención de alquilarlo o venderlo.