En un nuevo hito para la historia de la ciencia y la tecnología en América del Sur, Argentina completó la construcción del nuevo satélite de industria nacional Saocom 1B, que ya fue enviado desde la ciudad de Bariloche, provincia de Río Negro, hacia el sitio desde donde será lanzado al espacio.
"La misión más importante que tiene es generar mapas de humedad del suelo y que se permitan identificar pequeñas variaciones, además de desplazamientos del terreno, y con eso dar soporte a la industria agrícola y ganadera, hidrología y emergencias de terremotos, volcanes, deslaves", dijo a Sputnik Laura Frulla, gerenta de Observación de la Tierra de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae).
El satélite fue desarrollado por la agencia espacial nacional en conjunto con Invap, compañía tecnológica estatal de Río Negro, también responsable del desarrollo de los satélites de comunicaciones Arsat.
Cuenta con una antena de 10 metros de ancho con radar de apertura sintética (SAR, por sus siglas en inglés) que utiliza microondas en la banda L, por lo que tiene capacidad de penetración por debajo de la superficie de la tierra.
Años de esfuerzo y trabajo en equipo puestos en un gran proyecto como #SAOCOM1B. Despedimos con mucho orgullo al satélite y a los que lo acompañan! Vamos #SAOCOM1B @ciencia_ar @CONAE_Oficial @CNEA_Arg pic.twitter.com/HirkS9LuBf
— INVAP (@invapargentina) February 22, 2020
Novedades del SAOCOM1B
— INVAP (@invapargentina) March 2, 2020
Los equipos de @CONAE_Oficial,@vengsaok e INVAP finalizaron las verificaciones de los ensayos de propulsión y comenzarán con la integración de los paneles solares del satélite
Cada ensayo exitoso nos acerca al esperado lanzamiento🚀#Hayequipo🇦🇷🛰👩🏻🔬👨🏼🔬🛰🇦🇷 pic.twitter.com/UnFM4NgeCe
El Saocom 1B tiene fecha estimada de lanzamiento para fines de marzo desde Cabo Cañaveral, en Florida, EEUU, transportado por un cohete de la empresa SpaceX, propiedad del excéntrico empresario Elon Musk.
"Estamos desarrollando dos productos junto al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). Uno da soporte para optimizar el uso de fertilizantes, el momento del riego y de la siembra para maximizar rindes [rendimientos], el otro da soporte para controlar la fusariosis, una hongo que ataca la producción de trigo", contó la investigadora principal de la misión Saocom.
Frulla comentó que, mediante estudios multitemporales de recurrencia de agua, se podría medir si un espacio cumple con las necesidades de niveles constantes que requiere el cultivo de arroz o medir si es apto para el desarrollo inmobiliario, por ejemplo.
Protección de los recursos naturales
La puesta en órbita del Saocom 1A permitió que la Conae ya le pueda pasar al Instituto Nacional del Agua (INA) guías de crecidas, que informa sobre la susceptibilidad que tienen los ríos de desbordarse ante un evento meteorológico particular, explicó Frulla. El 1B potenciará estas capacidades.
Además, esta tecnología permite llevar adelante modelos digitales de elevación, que tiene aplicaciones múltiples como la siembra y la ganadería, el trazado de rutas o vías férreas, para el modelado de recursos hidrológicos, mapas de escurrimiento y drenaje en ciudades, e identificar puntos de acumulación natural del agua.
"Aplicado a la cuidado del medio ambiente, la información captada por estos satélites permitirá dar soporte a las leyes protección de bosques, de glaciares, de humedales. Como la banda L puede penetrar el suelo, se puede ver si debajo de las copas de los árboles crece un sotobosque con distintos estadios de crecimiento, por ejemplo", mencionó la investigadora de Conae.
"En paralelo, tenemos en desarrollo el Satélite Argentino-Brasileño para Información del Mar (Sabia-Mar), un satélite especializado en el estudio del océano, que ya pasó la revisión de diseño crítica", adelantó Frulla, en referencia al proyecto de cooperación con la Agencia Espacial Brasileña (AEB) y el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) de Brasil, y que tiene fecha estimada de lanzamiento para 2022.