Las claves del fracaso financiero de Pemex: perdió en 2019 92% más que el año anterior
Petróleos Mexicanos (PEMEX) perdió en 2019 casi el doble —un 92 %— que en 2018, 18.367 millones de dólares. Además, sus ingresos bajaron un 16,5 %, a 74.474 millones de dólares; mientras que la deuda con proveedores se disparó un 23 %, a 9.807 millones de dólares.
Como respuesta AMLO señaló que su gobierno hará todo lo que sea necesario para salvar a Pemex y convertirla en palanca de desarrollo e indicó que la recibió "en quiebra". Por su parte el director de finanzas de la empresa, Alberto Velásquez, reconoció que "estamos cerrando uno de los años más complejos de la historia más reciente de Petróleos Mexicanos", pero señaló que muchos indicadores han mejorado, lo que muestra que "vamos por buen camino".
Según explicó a Sputnik el analista del sector energético mexicano, Arturo Carranza, los problemas se originaron más de una década atrás. Por entonces las autoridades dejaron de invertir en la exploración de yacimientos y en la innovación en el sector y confiaron el futuro de la actividad al éxito del importante yacimiento de Cantarell. Descubierto en la década del 70, el complejo petrolero ha funcionado desde entonces, pero su capacidad ha disminuido.
"En el 2004 Pemex alcanzó su nivel de producción más alto, 3,3 millones de barriles diarios de petróleo en promedio, un nivel que le permitió colocarse entre los 10 principales productores de crudo en ese año. Sin embargo, a partir del 2004 ha registrado una caída gradual en su producción, debido a las condiciones de sus yacimientos", contó el experto.
Sin embargo, se sumó otro muy importante: la debilidad financiera heredada. De acuerdo a Carranza, cuando en 2014 cayeron estrepitosamente los precios del crudo (pasando de 100 dólares a 30 dólares el barril), la petrolera se había endeudado fuertemente poco tiempo antes, en 2013. En aquel momento, su director Emilio Lozoya (hoy en prisión por sobornos en el caso Odebrecht), decidió invertir para mejorar la producción por lo que "instrumentó una estrategia de financiamiento muy ambiciosa".
"Petróleos Mexicanos se endeudó de manera considerable para poder financiar lo que se dijo en ese momento que eran proyectos de inversión. Esta deuda se disparó aún más tras la caída de los precios internacionales y fue uno de los factores que se sumó a la compleja situación. Cuando el actual presidente AMLO llegó a finales del 2018, propuso aumentar el presupuesto que el gobierno destina a la petrolera en cerca del 8 % del 2018 al 2019".

"Para la administración actual es un tema de ideología el hecho de que PEMEX pueda producir el petróleo por cuenta propia, sin echar mano a lo que puedan aportar los privados. Pero para los analistas no es una ruta muy acertada porque estas asociaciones le permitirían contar con recursos frescos, con menores responsabilidades y le permitirían tener menos gastos de operación en un contexto tan complejo", opinó Carranza.