"Repsol obtuvo un resultado neto de 3.816 millones de euros en 2019, como consecuencia de los ajustes realizados para sentar las bases de la nueva orientación estratégica de la compañía, que se ha marcado como objetivo tener cero emisiones netas en el año 2050", informó la multinacional española a través de un comunicado.
En concreto, Repsol realizó una corrección de 4.849 millones de euros en el valor contable de algunos activos tras "asumir nuevos escenarios" de precios del crudo y el gas, de acuerdo con los objetivos del Acuerdo de París que la empresa adoptó recientemente.
Estos resultados, frente a los 2.341 millones de ganancias alcanzadas en 2018, reflejan el compromiso anunciado por Repsol el pasado diciembre de orientar su estrategia hacia la ambiciosa meta de las cero emisiones.
"Esta orientación estratégica muestra el compromiso de la compañía en la lucha contra el cambio climático y avanza en su empeño de liderar la transición energética, en consonancia con los objetivos de la Cumbre de París y los de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas", destacó Repsol en el comunicado.
En 2019, el resultado neto ajustado de la compañía se elevó a los 2.042 millones de euros, debido a la bajada de los precios del petróleo y el gas y los menores márgenes industriales, frente a los 2.352 millones del ejercicio anterior.
Pese a las pérdidas, el grupo destaca que el año pasado aumentó su flujo de caja operativo un 8%, hasta los 5.837 millones de euros.
Desde Repsol destacaron que se trata de una de las únicas compañías de su sector en el mundo con una estrategia compatible con los objetivos del Acuerdo de París.