"Esos vándalos que vemos atacando a policías, destruyendo Transmilenio (sistema de transporte público), no son jóvenes alterados, son infiltrados pagados por grupos residuales de la extinta FARC y posiblemente del ELN; los vamos a confrontar y judicializar como nos corresponde", dijo López en una rueda de prensa transmitida en streaming.
"El trabajo de la Policía y la Fiscalía en esta investigación sobre vándalos infiltrados por grupos armados en las marchas es impecable, rigurosa y sólida, no fue una cosa hecha de un solo día, fue un seguimiento de meses desde el año pasado, con mucho rigor y recolección de pruebas impecable, afirmó López.
El paro, del que participan organizaciones sindicales, estudiantes, indígenas y defensores de derechos humanos, entre otros, mantiene una agenda de marchas y protestas programadas para los próximos meses, a fin de exigir al Gobierno central, entre otras cosas, la protección a líderes sociales, mayor inversión en educación, la adecuada implementación del acuerdo de paz con las FARC y que no se avance en la reforma tributaria y pensional.
Las autoridades sostienen que luego de tres años de investigación, rastreos de viajes e interceptaciones telefónicas identificaron a seis hombres que integran las disidencias de las FARC y que habrían infiltrado las movilizaciones en Bogotá, los cuales fueron detenidos.
Según el reporte, los sujetos se contactaban de manera frecuente con varios de los jefes de las disidencias de las FARC en los departamentos de Arauca (nordeste) y Guaviare (sur) e integraban tres células urbanas de ese grupo, al tiempo que se encargaban de la logística de ese grupo armado ilegal y del adoctrinamiento de nuevos integrantes.