El campo toma las calles de Madrid para exigir una actividad rentable

"Lo que reclamamos, principalmente, son precios justos. Los costes de producción son cada vez más elevados, los insumos cada vez suben más y cada día cuesta más dinero producir, tanto para los productores agrícolas como los ganaderos", explica Ivana Martínez, Secretaria General de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, organización que nació en 1977 y que está afiliada al movimiento internacional Vía Campesina.

"¿Qué pasa? que nuestros productos no valen lo que deberían valer. Una vez que salen al mercado, las grandes distribuidoras son las que se quedan con el valor añadido de nuestra producción. Tenemos productos que tienen un diferencial de precio de un 600 y 700% entre el origen y el consumidor. El gran perjudicado es el agricultor, el ganadero y el consumidor", remarca.

El gobierno ha tendido la mano al sector campesino para buscar soluciones conjuntas. El pasado 3 de febrero inició una mesa de diálogo, que se extenderá por varios meses, entre las principales organizaciones agrarias (Asaja, Coag y Upa) y el Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. En esta cita, el ministro se comprometió a desplegar una serie de medidas para mejorar las condiciones del campo, como intentar aumentar la dotación para los seguros agrarios en los próximos presupuestos generales del Estado y reformar este mismo año la Ley sobre la cadena alimentaria.

​"Es importante que la distribución contribuya a valorizar desde el punto de vista económico y reputacional el trabajo de los agricultores y ganaderos (…) Todos los actores son fundamentales. La distribución, que en España es eficiente y moderna, es parte también de la solución" sostuvo el ministro Planas, este 5 de febrero cuando anunció que durante los próximos días se reuniría con las grandes empresas de distribución del país.

La dirigente campesina, Ivana Martínez, asegura que como trabajadores agrarios apoyan ese tipo de iniciativas, pero que necesitan resultados concretos.

"La lucha es entre los agricultores y campesinos con las grandes distribuidoras que se quedan con el valor añadido de nuestros productos, así que esperamos que esas reuniones no queden en palabras vacías".

Esperamos que el ministro no solo se reúna con ellos, sino que consiga que ellos tomen conciencia de la situación y que esos márgenes con los que ellos trabajan sean más justos para los agricultores, ganaderos y consumidores, que al final somos los dos eslabones más perjudicados de esta cadena".

La visita de Vox

A la concentración también acudieron los dirigentes de Vox, Santiago Abascal, Rocío Monasterio e Iván Espinosa de los Monteros. Algunos les apoyaron con aplausos y acompañándoles con las banderas de España, mientras que otros les obligaron a abandonar la concentración acusándoles de querer sacar provecho político de un problema que se arrastra desde hace más de 40 años.

"A los trabajadores del campo lo que nos arruina es la falta de precios justos no el aumento del salario mínimo interprofesional, aunque claro que fue la gota que rebosó el vaso de algunos pequeños productores que no lo pueden pagar, pero los agricultores ricos, a los que ellos (Vox) realmente defienden, esos tienen asalariados todo el año. Ellos los que están intentando es hundir a quien subió el salario mínimo", sostiene Martín Agreda, productor y sociólogo de 86 años y quien se hizo presente en la concentración.

Los productores del campo aseguran que se mantendrán movilizados hasta que se cumplan sus peticiones. Algunos alertan que detrás de estas movilizaciones por reivindicaciones justas podrían colarse maniobras políticas de la oposición para querer afectar al gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos.