"La fuga de presos muestra que las autoridades están corrompidas; reciben dinero para permitir ciertas ilegalidades dentro del sistema (...) ¿Quiénes son los que están comprados? Son policías, fiscales, jueces y miembros del sistema penitenciario", afirmó a esta agencia el criminólogo Juan Martens, quien lleva diez años estudiando a la organización criminal Primer Comando Capital (PCC).
Los presos cavaron en el baño de una celda un túnel de aproximadamente 15 metros de extensión; sin embargo, las autoridades admitieron que la mayoría de ellos se escaparon por la puerta del penal.
La ministra de Justicia, Cecilia Pérez, que ya había denunciado la existencia de un plan de fuga a mediados de diciembre de 2019, admitió que las medidas tomadas para evitar la evasión no fueron suficientes.
El secretario ejecutivo de la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), el abogado Óscar Ayala, dijo a Sputnik que la fuga de presos muestra que existe un "proceso de descomposición a nivel del Estado".
"La corrupción ha permeado a tal punto que ha hecho imposible el funcionamiento regular de las cárceles (...) hay evidencias, que son de público conocimiento, que vinculan a miembros del Congreso, del Poder Judicial y de la Policía en relación a la corrupción", agregó.
Ayala recordó que el diputado Ulises Quintana está procesado por vínculos con el tráfico de drogas y que la exdiputada Cynthia Tarragó fue detenida en Estados Unidos por agentes del Buró Federal de Inteligencia (FBI) por ser partícipe de un esquema internacional de lavado de dinero.
Sistema penitenciario
"El estado no representa un obstáculo para la concreción de los planes y negocios del PCC", expresó.
Martens y Ayala señalaron que la fuga no es el primer caso que demuestra que el narcotráfico ha captado a las autoridades paraguayas; los especialistas pusieron como ejemplo la fuga del PCC en 2018 de una cárcel de máxima seguridad; el motín en la cárcel de San Pedro, en el que murieron diez personas, y la evasión de un líder narco durante una operación armada en el centro de Asunción.
Cifras
Paraguay es el segundo principal productor de marihuana en América Latina después de México y es el país que más produce esta sustancia en América del Sur, señaló Martens.
Además, es el país por donde ingresa la mayor cantidad de cocaína en la región, a través del cual se logra llegar "fácilmente" al puerto de Santos (Brasil), explicó el especialista.
"Creo que por su ubicación estratégica y por la fragilidad institucional que tiene, Paraguay es central para el narcotráfico en el América del Sur", reflexionó.
El PCC es un grupo criminal surgido en la cárcel del estado brasileño de Sao Paulo en 1990 y que hace ya varios años que opera en Paraguay.
La organización se dedica al tráfico de drogas y armas, especialmente en las regiones fronterizas, y también al robo de cargas y contrabando de combustible.