Aída Merlano, la prófuga que suma tensión entre Colombia y Venezuela

A los 41 años, Merlano protagonizó un escándalo por compra de votos, una fuga cinematográfica de la cárcel en la que estaba presa en Bogotá y, ahora con 43, una detención a casi 1.000 kilómetros de distancia, en Venezuela.

El presidente de Colombia, Iván Duque, pedirá su extradición al autoproclamado presidente encargado, Juan Guaidó. Sin embargo, quien detuvo a la exsenadora en Maracaibo fue la Fuerza de Acciones Especiales de Venezuela (FAES), Policía élite creada por Nicolás Maduro en 2017. 

​Por ahora ambos capturados deberán enfrentar un proceso en Venezuela por ingresar a ese país con documentación falsa. Según el FAES, ambos quedaron a disposición del Ministerio Público.

¿Quién es Aída Merlano?

Barranquillera, nació en 1976. Desde que era una niña mostró interés por la política, y en 1991 debutó como líder civil en su ciudad natal. Estudió Derecho en la Universidad Libre. Desde 2011 y por tres años fue diputada del departamento Atlántico, hasta que comenzó a militar en el Partido Conservador. En 2014 fue miembro de la Cámara de Representantes de Colombia por Atlántico, hasta 2018.

El escándalo por la compra de votos

El fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, denunció la existencia de una red de compra de votos en todo el país que favoreció a ciertos candidatos de los partidos derechistas Cambio Radical, Conservador y Centro Democrático en las elecciones legislativas de 2018, quienes apoyaron a Duque en la segunda vuelta.  

Los agentes encontraron 268 millones de pesos en efectivo (unos 76.570 dólares) y documentos que dejaban ver que la campaña de Merlano excedió el tope de gastos permitido, así como también registros de los votos comprados, entre otros documentos que demostraban el ilícito.

La Corte Suprema de Justicia la condenó a 15 años de prisión en septiembre de 2019 por concierto para delinquir agravado y corrupción al sufragante, en calidad de coautora, y por tenencia ilegal de armas.

​La sentencia del tribunal también determinó que al menos 17 políticos más debían ser investigados por su presunta participación en este entramado de corrupción electoral. Merlano perdió su escaño en el Senado y fue recluida en prisión, donde, según versiones de prensa no confirmadas, habría intentado suicidarse.

Una fuga de película

El 1 de octubre Merlano fue trasladada desde la cárcel de mujeres El Buen Pastor a la Clínica de La Sabana por una supuesta cita con el dentista, de donde se fugó. Merlano se escapó por una ventana y descendió con ayuda de una cuerda hasta la calle, donde la esperaba una motocicleta conducida por un hombre vestido como repartidor de Rappi (aplicación de delivery), según videos de las cámaras de seguridad.

​El Gobierno pidió la renuncia al director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, general William Ruiz, y destituyó a la directora de El Buen Pastor, Diana Muñoz.

¿Quién ayudó a fugarse a Aída Merlano?

Aunque aún no está confirmado, el hombre con el que Merlano fue capturada en Maracaibo, Zulia, pareciera ser el mismo que la ayudó a escapar, Jacob Manuel Vargas Silvera, informó Semana. Vargas Silvera fue integrante de la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) de Merlano. 

​En documentos del Congreso aparece que el hombre trabajó en la Cámara de Representantes desde 2017 y tuvo varios contratos en la UTL de Merlano. Tenía el grado se asistente 1 en su labor en el Legislativo y en su hoja de vida figura que nació en Barranquilla (Atlántico), de donde también es Merlano.