"El Ministerio de Exteriores rechaza y condena decididamente la agresión que sufrió la Embajada de los Estados Unidos", dice un comunicado del ente.
Se expresa también la disposición a "reforzar la seguridad de todas las misiones diplomáticas extranjeras que se encuentran en Bagdad.
La cadena Al Arabiya informó previamente que tres proyectiles impactaron en la noche del 26 de enero en el recinto de la Embajada de EEUU, uno de los cohetes cayó sobre la cafetería de la legación.
Según la televisión Al Sumaria, el ataque afectó la denominada zona verde de la capital iraquí, donde se encuentran los edificios gubernamentales y embajadas, y provocó varios heridos, de acuerdo con una fuente policial.
El primer ministro en funciones de Irak, Adel Abdul Mahdi, declaró a través de un comunicado que ordenó "hallar y castigar a los responsables del ataque a la Embajada de EEUU".
Por su parte, el presidente del legislativo iraquí, Mohamed Halbusi, condenó el ataque y afirmó que "son inadmisibles" las agresiones contra la Embajada de EEUU pues "dañan la reputación de Irak, debilitan el Estado y afectan su soberanía".
El pasado 9 de enero dos cohetes cayeron en la zona verde de Bagdad activando las alarmas de ataque aéreo, también en la Embajada estadounidense.