"Quiero anunciar que mi gobierno ha decidido apoyar la reelección de Luis Almagro, quien ha cumplido una labor fundamental en la defensa de la democracia y el estado de derecho en la región", dijo la canciller boliviana, Karen Longaric, durante una sesión especial del Consejo Permanente de la OEA, en Washington.
Almagro, quien suma ya respaldos de varios países, menos el de Uruguay, buscará la reelección en el principal cargo de la OEA en una reunión prevista para marzo en la cual enfrentaría a por lo menos otros dos rivales: el veterano embajador peruano Hugo de Zela y la excanciller ecuatoriana María Fernanda Espinosa, según reportes de prensa.
Longaric, cuya presentación en la OEA fue divulgada por la cancillería de La Paz, elogió la labor de Almagro al frente del organismo.
En ese cambio anticipado de gobierno en Bolivia, tuvo que ver en parte un reporte de la OEA que reveló supuestas irregularidades en las elecciones generales del 20 de octubre, ganadas por Morales, y que sirvieron de sustento a las denuncias de fraude que derribaron al líder indígena.
Longaric aseguró a los representantes americanos en la OEA que "Bolivia está en paz y marcha hacia su reestructuración democrática", en alusión a las elecciones generales convocadas para el 3 de mayo como salida a la crisis del año pasado.