"La salida amigable es pedirles a ellos (ACI) que en este caso se pueda aceptar que los depósitos que realizaron posiblemente en la conformación de la empresa mixta puedan ser recuperados por parte de Alemania y por parte de Bolivia", declaró Ferrufino, seǵun refirió el diario Página Siete en su edición digital.
La agencia estatal de noticias ABI citó por su parte que el viceministro aseguró que el Gobierno de Jeanine Áñez, que tiene mandato "excepcional" hasta mediados de año, quería "no buscar una confrontación" con el grupo alemán, que tenía acordado invertir con la estatal boliviana YLB al menos 1.200 millones de dólares.
El Gobierno transitorio instalado en Bolivia desde el 13 de noviembre desarrolla una campaña de desacreditación de las gestiones de Morales que incluye diversas denuncias de supuestos actos de corrupción así como demandas penales contra el exmandatario y decenas de sus colaboradores.
El contrato YLB-ACI, que apuntaba a industrializar el litio y sus derivados hasta fabricar en Bolivia baterías de ion litio para el mercado automotor, fue cuestionado por el comité cívico de Potosí, departamento sureño en el que se encuentra el salar de Uyuni, el mayor del país.
Ferrufino dijo que tras el cambio de gobierno ACI envió dos cartas planteando la continuación del proyecto industrial, pero no confirmó si la administración de Áñez ha respondido a esas comunicaciones.
El nuevo Gobierno todavía no ha decidido si la industrialización del litio será desarrollada mediante proyectos enteramente estatales o en sociedad con firmas extranjeras, añadió el funcionario; además del acuerdo con los alemanes hay otros con empresas chinas.