"A Nisman lo mataron por su denuncia contra [la expresidenta] Cristina Fernández de Kirchner [2007-2015] y su espurio pacto con Irán", opinó este 17 de enero desde las redes sociales la exjefa de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso.
Al acto acudirá la diputada Elisa Carrió, integrante de la coalición del Ejecutivo anterior, para quien el "asesinato de Nisman fue un crimen político" y el Ejecutivo anterior "estuvo claramente implicado".
Una de las organizaciones judías más importantes del país, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), organizará el 19 de enero su propio acto en el cementerio judío de La Tablada, en la provincia de Buenos Aires, donde está enterrado el fiscal.
En la convocatoria, programada para las 10.00 hora local (13.00 GMT), se "reiterará el pedido de justicia para identificar a los responsables de su muerte, así como en la causa AMIA", informó la entidad en un comunicado.
Como responsable de la Unidad Fiscal de Investigación encargada de esclarecer el atentado de 1994 a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Nisman acusó cuatro días antes de morir a Cristina Fernández de encubrir a funcionarios iraníes acusados por la justicia argentina de estar detrás del ataque.
La acusación contra la exmandataria, actual vicepresidenta del Gobierno de Alberto Fernández, se basaba en un memorándum de entendimiento que su Gobierno firmó en 2013 con el entonces presidente iraní Mahmud Ahmadineyad para autorizar interrogatorios de los funcionarios iraníes acusados del atentado sobre los que penden pedidos de captura internacional.
El documento nunca entró en vigencia porque no fue ratificado por el parlamento iraní y fue después declarado inconstitucional por la justicia argentina.
En los últimos años, la justicia argentina ha sido incapaz de avanzar en el esclarecimiento de lo ocurrido.
Mientras tanto, un tribunal elevará a juicio en una fecha todavía a determinar la causa en la que está procesada por encubrimiento agravado la exmandataria y vicepresidenta por supuestamente encubrir a los acusados iraníes mediante la firma del memorándum.
Este asunto también ha causado grietas y divisiones en las instituciones que representan a la comunidad judía en Argentina, al punto que quien fue el presidente de la AMIA, Agustín Zbar, se vio forzado a alejarse de la institución el año pasado después de que pidiera a la DAIA que desistiera de impulsar esta causa contra Fernández.